
En apenas 72 horas, en dos procedimientos, personal de Gendarmería Nacional detuvo a tres tucumanos por transportar 77 kilos de cocaína. Los primeros datos de la investigación revelaron que los cargamentos eran trasladados a la provincia.
El primer decomiso se concretó el viernes a la mañana en el control que tiene la fuerza en El Naranjo, donde se unen las rutas 9 y 34. Los uniformados detuvieron a dos camionetas que llevaban 51 kilos de cocaína, que estaban ocultas en las ruedas de dos camionetas. Fueron detenidas tres personas, una pareja de santiagueños y un tucumano. Sus identidades no fueron dadas a conocer por el momento.
Habrían cargado la droga en Orán y desde ahí podrían haberse trasladado hasta algún punto de nuestra provincia para hacer una pausa en el viaje, ya que se sospecha que formaban parte de una organización que se dedica al tráfico de cocaína en gran escala, para distribuirla en Córdoba y en Buenos Aires.
Esta no es la primera vez que se registra un secuestro de estas características. El 6 de septiembre en la localidad salteña de General Pizarro. En un control de rutina, Gendarmes detuvieron a dos camionetas Toyota Hilux porque tenían un andar irregular. En el control, observaron que las ruedas eran de un tamaño anormal y que sus ocupantes estaban nerviosos. Decidieron hacer una requisa y allí encontraron 110 kilos de ese estupefaciente. Fueron aprehendidos Hugo Gregorio Márquez (63 años), su pareja Alicia Lidia Molina (70) y el hijo de la última, Sergio Alberto Rodríguez (35).
EN GENERAL PIZARRO. En el control, observaron que las ruedas eran de un tamaño anormal: encontraron 110 kilos de ese estupefaciente.
La droga, según los datos que trascendieron de la causa, habría sido trasladada a una vivienda de Yerba Buena, ubicada al frente del shopping El Portal. Los investigadores siempre sospecharon que los detenidos eran meras mulas, es decir, personas que eran contratadas para transportar la droga a otras provincias.
Tucumán fue el centro de una investigación en la que se desarticuló una banda que se dedicaba al transporte de cocaína en ruedas modificadas. Los pesquisas, en un allanamiento realizado en Río Seco, encontraron un taller que se habría dedicado a concretar esas transformaciones. Por el caso fueron detenidos el empleado judicial Lucas Luna Sosa, Damián Exequiel Chico y Héctor Raúl Prado, todos oriundos de Tucumán.
EN RÍO SECO. Encontraron un taller que se habría dedicado a concretar esas transformaciones.
Según la investigación, Mariano Santillán, hermano del comisionado de la localidad santiagueña de Villa Matoque, Alejandro Alfonso Santillán, traficaba la droga desde Aguas Blancas o Salvador Mazza y la trasladaba hasta nuestra provincia. Después de enfriar la sustancia (en la jerga narco significa mantenerla oculta para evitar que se le secuestren), la ocultaban en dobles fondos de llantas de vehículos para venderla en otras provincias.
EL DOMINGO. Gendarmería secuestró 21 kilos en un control en Los Naranjos.
En el otro procedimiento concretado el domingo, también realizado por gendarmes en el puesto de El Naranjo, encontraron 21 kilos de drogas en un vehículo en el que se desplazaba una familia tucumana. La pareja quedó detenida y los dos hijos fueron entregados a sus parientes.
Con estos secuestros, ya son 254 los kilos de cocaína decomisados que tenían como destino Tucumán. Durante todo el año pasado, fueron 497 los kilos de esta droga incautados.