Agentes de la Unidad Especial, Guardia de Infantería Este y personal de la Comisaría Alderetes se encontraban realizando tareas preventivas con paradas y recorridos, cuando observaron una motocicleta que apareció bruscamente y a gran velocidad, cuyos ocupantes eran, un menor de 17 años y lo acompañaba una mujer de 19 años.
De acuerdo a lo manifestado por los empleados policiales, estas personas, cuando se percataron de la presencia policial, intentaron huir; sin embargo, fueron alcanzados e interceptados a los pocos metros. Durante la maniobra que realizaron para escapar, los motoristas advirtieron que la mujer había arrojado una bolsa hacia una zona descampada.
Una vez que los individualizaron, les solicitaron que exhibieran sus pertenencias. El joven conductor hizo entrega de una riñonera en la que contenía la suma de poco más de $25.000 y la mujer de un celular de su propiedad. En cuanto a lo que había arrojado, fue verificado y se trataba de los envoltorios de una sustancia blanca.
Que, al sospechar que se trataba de drogas, dieron intervención a la División de Drogas, Didrop Este, cuyo equipo especializado realizó la prueba de campo la cual constató que se trataba de cocaína. Ambas personas, junto al vehículo, la droga, el dinero y el celular, fueron trasladados hasta la Comisaría jurisdiccional.
Desde allí, se comunicó lo sucedido a la Unidad Fiscal de Narcomenudeo que ordenó que el menor sea entregado a sus padres, mientras que la mujer, se proceda a averiguar su planilla de antecedentes, en caso de no tener ninguna causa pendiente sea puesta en libertad. En cuanto a la sustancia, dispuso su secuestro, como así también del dinero y el celular que servirá para avanzar en la causa.