Cada 4 de febrero se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer, con el objetivo de visibilizar y promover los cuidados y terapias sobre estas enfermedades, además de alertar sobre la importancia de los chequeos para poder detectarlo antes de que avance.
Por año, en la Argentina, más de 130 mil personas son diagnosticadas de cáncer. Según el Observatorio Global del Cáncer (Globocan), de la Agencia Internacional de Investigación sobre Cáncer (IARC), que se basó en los datos producidos por registros de cáncer de base poblacional de nuestro país, en la Argentina ocurrieron 130.878 casos nuevos de cáncer en ambos sexos en el año 2020, última cifra oficial. Es decir, cada cuatro minutos se diagnosticó con cáncer a una persona en el país. La tasa de incidencia ajustada por edad fue de 212,4 casos por 100.000 habitantes, convirtiendo a la Argentina en un país con incidencia de cáncer media-alta.
El cáncer es una enfermedad que se produce cuando se da una alteración en el crecimiento o la creación de nuevas células. Cuando este proceso se altera se pueden producir células en mayor cantidad de las que se necesitan o, en otros casos, las células viejas no mueren en el momento que les corresponde y así se forma una masa de tejido que se conoce como tumor, que puede ser benigno o maligno.
Es por eso que se dice que el cáncer puede empezar en cualquier lugar del cuerpo, porque el organismo está formado de muchos tipos de células. Esto es lo que sucede en la mayor parte de los cánceres, salvo los hematológicos. Existen más de 200 tipos de cáncer diferentes, y cada uno debe ser diagnosticado y abordado de manera específica. De allí la importancia de contar con los nuevos tratamientos.
En lo que coinciden todos los expertos es que un gran abanico de cánceres se pueden prevenir. En tanto, otros pueden ser detectados en forma precoz y esto es clave para las posibilidades de curación. Además, resulta clave poder acceder a los tratamientos más efectivos.
Sobre este punto, consultada, Sandra Tirado, Secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, contó: “Durante el segundo semestre del 2022 se firmó la Resolución ministerial 3377/22 que aprobó el nuevo Listado Complementario de Medicamentos Oncológicos del Banco de Drogas Especiales. Este Listado es el más amplio aprobado hasta el momento, basándose en el Listado de Medicamentos Esenciales que propone la OMS, construido en base a evidencia científica y recomendaciones de asociaciones de expertos en la materia”.
“En este sentido, el número de principios activos del Listado aprobado representa el 151% del número de principios activos en el Listado de Medicamentos Esenciales de la Organización Mundial de la Salud. Por lo tanto, podemos decir que a nivel regional estamos muy bien posicionados, ya que, tenemos un listado que contempla asegurar el acceso a los tratamientos de primera línea para los tipos de tumores más prevalentes, no solo de tratamientos considerados esenciales como la quimioterapia o la hormonoterapia clásica, sino terapias que son innovadoras de reciente aprobación, alguna de ellas de alto precio”, sumó la funcionaria que depende del Ministerio de Salud de la Nación.
En el mundo hay unos 3000 potenciales nuevos tratamientos en investigación. “El cáncer hoy es una problemática completamente diferente a lo que era décadas atrás. Hoy, entendemos al cáncer a nivel molecular, con lo cual los diagnósticos son mucho más específicos y consecuentemente, también lo es el tratamiento”, contó Susana Baldini, Directora Médica de la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (Caeme).
Según esta cámara, que representa a las empresas farmacéuticas y biotecnológicas que desarrollan y comercializan medicamentos innovadores en el país, en la actualidad hay más de 9000 compuestos que se encuentran en diferentes etapas de investigación en el mundo. Poco más de un tercio de ellos, 3148, corresponden a desarrollos contra el cáncer.
La especialista explicó que desde que comenzó el siglo XXI se aprobaron 215 medicamentos oncológicos a nivel global que incluyen mecanismos de acción innovadores, diferentes de los que existían. De ese total, casi la mitad (104), se lanzaron en los últimos cinco años. “Si analizamos en términos globales, en Argentina se han visto esfuerzos por acompañar el ritmo de la innovación y la enorme mayoría de los medicamentos que están disponibles en el mundo también lo están en nuestro país”, aseguró.
Otro cambio se dio en las formas de administración, cerca de la mitad de los medicamentos aprobados contra el cáncer fueron de vía oral, que facilitan su administración extrahospitalaria, lo que es más cómodo para el paciente y además evita internaciones u horas en hospitales de día, con los costos adicionales que eso representa para el sistema de salud.
Los desafíos de la llegada de las nuevas terapias y medicamentos al país
“La introducción de un fármaco o cualquier tecnología al país sigue un ciclo que es similar para todas. Tiene un paso muy importante que es el paso regulatorio, en este caso la ANMAT es nuestra agencia reguladora de un prestigio muy importante a nivel regional e internacional. La ANMAT es la que determina si esos fármacos cumplen criterios de eficacia, calidad y seguridad”, comenzó a responder Tirado, ante la consulta de los principales desafíos que se enfrenta al momento de tratar de sumar al país nuevos tratamientos o fármacos contra el cáncer.
La funcionaria nacional añadió: “Una vez pasada esta ‘barrera’ regulatoria necesaria, la tecnología comienza un camino para introducirse en el mercado que no solo tiene que ver con demostrar su efectividad clínica, ser incorporada en guías basadas en evidencia, sino que también se debe asegurar la asequibilidad, para poder lograr que sea equitativo para el sistema de salud”.
Sobre si la accesibilidad es la misma en el sector público y privado, Tirado respondió: “Partiendo de las características propias del sistema de salud argentino (fragmentación, segmentación), el acceso a los tratamientos tiene a su vez características que les son propias a cada subsistema de salud dependiendo del financiador”.
“En el caso del sector público, es un compromiso asumido por este Ministerio el trabajo constante por la mejora en el acceso a las terapias esenciales. No solo por la actualización del listado de medicamentos disponibles para complementar a las jurisdicciones sino también por los esfuerzos en tratar de acortar los tiempos al acceso efectivo”, dijo la Secretaria y cerró: “En ese marco, también se construyó el Mapa de Acceso al Tratamiento Oncológico, una herramienta inédita que recopila de forma centralizada información para todos los pacientes oncológicos de las provincias para poder facilitar el recorrido hacia el acceso efectivo al tratamiento”.
Desde la mirada de la industria, se celebró que cada vez más medicamentos oncológicos se aprueban en forma acelerada y detallaron que, en 2021 representaron el 64% de las aprobaciones, un porcentaje muy por encima que el de cinco años antes donde había llegado al 37% en 2017. Sobre todo se dieron casos de aprobaciones, aunque no hayan completado toda la etapa de investigación, pero que lograron demostrar indicios de beneficio suficientes como para no demorar su disponibilidad, en aquellos casos en los que no se cuenta con otras opciones terapéuticas.
Baldini explicó al respecto: “Es algo habitual y, como muestra la estadística, cada vez más frecuente: se realizan registros bajo condiciones especiales que luego se amplían cuando se va completando la evidencia de seguridad y eficacia, a la vez que se sigue más de cerca a los pacientes que lo reciben. También, al atacar blancos moleculares, en muchos casos puede un fármaco luego aprobarse para un cáncer en otra locación, siempre que la estirpe celular muestre el mismo comportamiento; esto se valida con otros estudios clínicos (por ejemplo, en carcinomas)”.
Lo nuevo para cáncer de próstata y de mama
En la Argentina, según el Instituto Nacional del Cáncer (INC), se diagnostican por año más de 11 mil casos de cáncer de próstata, registro que representa el 20% de todos los tumores malignos en varones y el 9% de la totalidad de cánceres del país. Frente a este panorama, plasmar la ciencia más innovadora en significativos avances médicos que redefinan la vida de los pacientes, es prioritario.
Consultado por este medio, Alfredo Gaete, Gerente Médico en Bayer Cono Sur, contó: “Hay un nuevo estándar de tratamiento para pacientes con cáncer de próstata hormono sensible metastásico (que se diseminó a otras partes del cuerpo). Hasta la aparición de este nuevo abordaje terapéutico, el paciente con cáncer de próstata en estadio metastásico que se trataba con quimioterapia, necesitaba además, una terapia de deprivación androgénica (terapia doble). Este nuevo enfoque de intensificación, se basa en el abordaje con una triple terapia, esto es, que los hombres con cáncer de próstata sensible a hormonas metastásico reciban un esquema con darolutamida y dos terapias más (quimioterapia más terapia de privación de andrógenos), logrando reducir la mortalidad más de un 30%. Además de lo anterior, se reducen eventos clínicos importantes relacionados con la progresión de la enfermedad”.
Sobre lo más novedoso que llegó al país para combatir el cáncer de mama, Valeria Cáceres, médica oncóloga clínica, Jefa del Departamento de Oncología Clínica del Instituto “Ángel H. Roffo”, contó: “Dentro de lo que son los tumores triples negativos que no expresan receptores a las hormonas y tienen sobreexpresión a la proteía HER2, el último tratamiento que se aprobó es la inmunoterapia. En este caso, la inmunoterapia es utilizada antes de la cirugía y lo que hace es aumentar las chances de que la paciente haga una respuesta completa patológica. Es decir, las pacientes que tienen tumores localmente avanzados se reduce con inmunoterapia, combinado con quimioterapia, en un alto porcentaje de alrededor de 65%. De esta manera, las pacientes no tienen enfermedad en el momento de la operación”.
“Esto también se utilizan en enfermedad avanzada, en combinación con quimioterapia, en primera línea enfermedad metastásica y que aumenta la sobrevida. La inmunoterapia, que es un avance en casi todos los tumores, específicamente también en el cáncer de mama aumenta la sobreviva en pacientes”, sumó Cáceres.
Según la mirada de la profesional de la salud: “Probablemente todo lo que tiene que ver con las nuevas terapias contra el cáncer están relacionadas con las alteraciones genéticas de los tumores. Se busca actuar específicamente contra esas alteraciones. Es por eso, que cada vez más nos basamos en la secuenciación de los genes. También, dentro de poco, cuando podamos usar la biopsia líquida, vamos a poder detectar el ADN de las células tumorales circulantes y adelantarnos a que la enfermedad sea clínicamente evidenciable”.
La oncóloga, que también es directora de la Carrera de Especialistas en Oncología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, ante la pregunta del acceso a los nuevos tratamientos, respondió: “En realidad en el país se cuenta con los tratamientos más avanzados el problema que el acceso no es uniforme. Depende de la cobertura del paciente, no todas las coberturas aceptan la misma cantidad de tratamientos de la misma forma”.