Luego de la suba del miércoles, en el día de ayer el dólar blue se incrementó unos $5, es decir, un 3,1% para ubicarse en los $167. El día anterior ya había experimentado un rebote de casi 9%, pero de todos modos, aún conserva una baja de $28 o 14,4% desde el récord de $195 alcanzado el pasado 23 de octubre. Mientras que el dólar mayorista se encuentra cerca de los $80, por lo que la brecha cambiara se ubica ahora en el 109,9%.
Cabe recordar que justamente el pasado 23 de octubre había alcanzado un máximo de 150%. Mientras tanto, en el promedio de los bancos, la divisa norteamericana se vendió a $140,43, teniendo en cuenta el recargo de 65% por la aplicación del Impuesto PAIS y la percepción como adelanto del Impuesto a las Ganancias. De esta manera, la diferencia es de unos $27 en relación con el valor del dólar blue en las cuevas de la City.
Esto se da luego de que hasta el pasado martes se registrara un desplome de 24% en menos de tres semanas en lo que hace a la cotización del dólar blue. Pero el precio de venta en bancos, con fuerte carga tributaria, fue el que le puso piso a la baja. Por otra parte, en la jornada financiera de ayer, el Banco Central volvió a perder reservas debido a que tuvo que vender USD 75 millones para poder abastecer al mercado.
De esta manera, las reservas internacionales se ubicaron en poco más de USD 39.000 millones, por lo que descendió al monto más bajo desde el 2 de enero de 2017. Además, en lo que hace a los depósitos privados en efectivo en dólares perdieron unos USD 28 millones. Por lo que en el sistema bancario sólo hay menos USD 15.000 millones, todo a causa de las regulaciones cambiarias anunciadas el pasado 15 de septiembre.
En ese marco, los analistas financieros indicaron que será clave cómo llegaremos a diciembre, por lo que para ellos es necesario seguir de cerca la dinámica de los plazos fijos y de los depósitos, al tiempo que contemplar si el BCRA sigue con el comportamiento que viene mostrando en las últimas jornadas. Y es que el dinero es retirado de los bancos ante la creciente incertidumbre en materia económica.
En este escenario, la intención del equipo económico es la de alejar lo más que se puede el fantasma de la hiper devaluación, algo que parecía posible luego de que el dólar blue hubiera bajado de forma estrepitosa durante el transcurso de las dos semanas anteriores. Sin embargo, estas jornadas que tuvieron lugar en los últimos días, encendieron la alarma en el interior del Gobierno nacional justo cuando llegó al país la misión del FMI.
Y es que la otra intención del Gobierno es poder complacer a los delegados enviados por el organismo multilateral de crédito con el fin de que concedan plazos beneficiosos para el pago de la deuda externa contraída con ellos. Es por ello que el ministro de Economía, dio vía libre a cuanto ajuste haya que hacer, tal es el caso de las jubilaciones, pero también sucede con el IFE o los ATP, con el objetivo de achicar el déficit fiscal, como pretende el FMI.
