Este viernes el Ministerio de Salud confirmó en su reporte diario un total de 630 casos de coronavirus, lo que evidencia una suba ante el promedio de 500 de las últimas jornadas. Debido a este nuevo panorama, el Comité Operativo de Emergencia (COE) de Tucumán retomó las reuniones con el fin de evaluar acciones ante el incremento de infectados. Ahora bien, ¿Dónde estaban metidos antes de ayer?
Una de dos, o se trata de inútiles impresentables o de irresponsables a sueldo. Y es que la indolencia de la administración provincial sólo puede compararse a la de la Nación en materia de ineficiencia y de mediocridad. ¿De qué vale la implementación del mentado pase sanitario si sólo se cumple en la teoría? Va de suyo que en la práctica de ninguna manera se cumple y para muestra basta un botón.
En los bares, restaurantes, boliches y en toda la actividad nocturna, tanto Yerba Buena como en la Capital, nadie controla nada. Por el contrario, todo permanece lleno y sin respetar los más mínimos protocolos sanitarios. ¿Qué pasa entonces con el COE?.
Y es que muchos creyeron que el pase sanitario sería una especie de comodín en el macabro juego de cartas que la sociedad está librando en contra de la pandemia mundial de COVID-19. Pero la única verdad es la realidad, y la misma se impone por peso propio ya que el gobierno lo puso en funcionamiento, pero nadie lo respeta y lo mismo ocurre en cualquier lugar y tipo de actividad que se lleve a cabo.
Entonces, la administración provincial sólo alcanza a amenazar y amenazar con más sanciones, pero eso no garantiza nada. Por el contrario, invita a no hacerle caso a tono con una sociedad adolescente en la que juegan a ser rebeldes sin causa. Y es que cuando los dirigentes necesitan mostrarse autoritarios es porque perdieron autoridad, y desde hace rato que esto es así por estas latitudes.
Mientras tanto, los casos y muertes continúan en peligroso y permanente aumento, pero nadie controla nada. La realidad es que tenemos muchos casos positivos, ayer ya superamos los 600 y eso genera muchos pacientes complicados o fallecidos. Para que no haya una problemática en restricción de habilitaciones, necesitamos que las autoridades hagan que se cumpla el protocolo.
“Estamos reactivando el COE para prevenir y no tener que ir a medidas más drásticas”, dijeron desde el gobierno provincial. Esto significa que el fantasma de las restricciones y la cuarentena eterna vuelve a sobrevolar como posibilidad/amenaza para una economía destruida y que algo así no haría más que terminarla de detonar por los aires. Ojalá que todavía estemos a tiempo de revertir esta situación.