A esta altura de los acontecimientos, todavía la sociedad tucumana se pregunta. ¿A quién defiende Eduardo Cobos? Porque claramente, a la gente común no la defiende. Curiosamente, Cobos hizo todo lo posible para llegar a ocupar el lugar que hoy ostenta y que significó un verdadero sismo hacia el interior del peronismo local. Y es que, en definitiva, hasta el día de hoy se desconoce los intereses de quién protege el mentado Defensor del Pueblo actual.
Pero si de algo se puede estar seguro es del hecho de que no son los intereses de los tucumanos justamente los que defendería este “Defensor del Pueblo”. Esto se debe al hecho de que, desde la asunción de Eduardo Cobos, lo único que se conoce a ciencia cierta de las acciones de este funcionario es que cobró un abultado sueldo durante los meses que lleva al frente de ese puesto.
Y es que los intereses de la ciudadanía en general y de los emprendedores en particular no figuran en su agenda de prioridades. Los únicos intereses que conoce el actual Defensor del Pueblo serían los de proteger a los amigos del poder, quien quiera que sean. En ese sentido, se conoció que los ex empleados de la Mutualidad Provincial criticaron ayer la actuación de la Defensoría del Pueblo en relación a una presentación que ellos realizaron.
La misma, apunta contra el legislador Daniel Deiana y acusaron al organismo de actuar con “tibieza”. Así lo indicaron por medio de un comunicado dado a conocer a la opinión pública, en el que dejaron en claro que son ellos “quienes sufrieron humillaciones de parte del legislador jaldista Daniel Deiana por oponernos a sus manejos turbios en la Mutualidad. Recurrimos a distintos actores del Estado en busca de solidaridad”.
En esa línea, agregaron que “en esa búsqueda, fuimos recibidos por el gobernador y sufrimos la falta de empatía de la conducción de la legislatura que nos recibió con los matones de Deiana en la puerta”. Al respecto, dejaron en claro que “al recurrir a la Defensoría del Pueblo, organismo con rango constitucional que debe velar por la defensa y protección de los derechos individuales, observamos que su actuación es una pantomima que consistió en simples pedidos de informes a otros organismos, quizás para no involucrarse”.
En definitiva, los ex trabajadores dijeron que el discurso de los nuevos integrantes del organismo contrasta con la “tibieza de su accionar justamente donde debería ser más celosa con su proceder, atento que el involucrado es un legislador provincial”. No en vano, afirmaron que “a los ojos del ciudadano común, la actuación de la Defensoría del Pueblo deja mucho que desear porque se podría pensar que es una devolución de gentilezas para con el legislador Deiana”.
Cabe recordar que el Defensor del Pueblo, Eduardo Cobos fue elegido el pasado 8 de marzo con el voto, entre otros, del legislador Deiana. Para colmo, los ex empleados de la Mutualidad Provincial también indicaron que no es la primera vez que sufren esta situación. “Quienes somos víctimas de la administración de Deiana, sufrimos muchas veces esta situación durante el gobierno de Alperovich. Entidades que, con su silencio, fueron cómplices de ese atropello”.
Al respecto, el comunicado cierra dando cuenta de que “lo triste es que quién debe defender al pueblo, lo haga de acuerdo a la cara del cliente y mientras no altere el prontuario de ningún amigo”. En ese sentido, cabe preguntarse entonces: ¿Cuándo es que el Defensor del Pueblo comenzará actuar como tal? Eduardo Cobos tendría que entender que, más temprano que tarde, deberá rendir cuentas ante la sociedad por su falta de accionar.