Scavarda hizo gravísimas denuncias de maniobras fraudulentas de Deiana y lo acusó de haber utilizado los activos de la Mutualidad Provincial Tucumán para adueñarse del Sanatorio Argentino, y hacer negocios privados.
“Tuve la mala suerte de ser su yerno”, señala Scavarda. La relación con el jefe de la Mutualidad y dueño del Sanatorio Argentino terminó muy mal.
“A finales de 2018, la hija Carolina Deiana se presenta en mi domicilio con la noticia de que yo iba a ser padre de su hijo, y contando que había ido a un lugar para hacerse un aborto clandestino junto al padre. El padre (Deiana) le había conseguido un doctor, un médico…, y que llegó a la puerta de ese lugar y se arrepintió, y por eso le venía a contar al supuesto padre, que era yo…”, relató.
“Me pedía que me haciera cargo de esta situación (la paternidad), cosa que obviamente hice y que siempre haría…”, añadió.
“En febrero de 2019 Daniel Deiana compra el Sanatorio Argentino y me pone a mí para administrarlo, mientras él manejaba la Mutualidad y estaba en campaña política para ser legislador”, indicó Scavarda.
Al poco tiempo terminó la relación de Sacavarda con la hija de Deiana. “Decido irme de mi casa, y esta persona inicia una suerte de guerra conmigo para que vuelva con ella. Cuando se dio cuenta de que no iba a volver, empezó a odiar, empezó a poner al nene de excusa, ahí se mete en la relación Deiana padre, y empieza con falsas denuncias y acusaciones. Me termino considerando despedido y me voy del Sanatorio Argentino.”
“A los tres meses de vida de esta criatura, decido hacerme un estudio de ADN, por insistencia de mis familiares y especialmente de un amigo, arrojando un resultado negativo, excluyente. No solamente me estafaron en cosas materiales, no solamente no recibí ni un peso por mi gestión en el Sanatorio Argentino, sino que también fui ultrajado como hombre, fui ultrajado como padre… Mi madre terminó muy mal, enferma, yo terminé muy enfermo, tomaba medicamentos para despertarme y para dormirme, porque no podía con la situación”, agregó.
“A todo esto, Daniel Deiana me hacía denuncias, Carolina Deiana me decía que si yo quería verlo al niño debía firmarle la renuncia al Sanatorio Argentino, debía firmarle mediante un escribano que no iba a reclamar por mis bienes…, es decir que mis bienes eran de ella.”
“Yo intenté seguir mi vida, presenté la denuncia de filiación en la Justicia de Familia, pero esta gente no se dio por notificada porque a la abogada del señor este, que es su actual novia, no le gusta mucho ir por tribunales, al parecer no hace muy bien su trabajo. No se dieron por notificados, por lo que nunca se dieron por enterados que yo ya sabía que no era mi hijo. Finalmente, me tuve que ir de mi ciudad, tuve que dejar a mi madre, mi trabajo, mis amigos…”, relató Scavarda.
“Necesito que los tucumanos sepan quién los está representando en la Legislatura, este señor que me estafó… El intentó ponerme bozales legales para que yo no hable, ya perdió en primera y segunda instancia y no lo va a lograr…”, manifestó.
“Yo voy a seguir hablando, por mí y por toda la gente que ha sufrido las persecuciones.”
“Deiana adquirió el Sanatorio Argentino con fondos de la Mutualidad. Usó activos los activos de la Mutualidad, tanto financieros como los servicios médicos, para currar en su sanatorio. El Sanatorio Argentino presentaba una suerte de servicio en conjunción siempre con la Mutualidad Provincial, ya que Daniel Deiana usa a la Mutualidad para prestar servicios privados a los clientes del Sanatorio Argentino, y los cobra a su nombre obviamente…”, denunció Scavarda.
“En el Sanatorio Argentino Deiana hizo exactamente lo mismo que en la Mutualidad: despidió a todo el mundo. La gente se quedó sin su indemnización, gente a la que le debían tres meses de trabajo y aún así la despidieron… Se quedaron sin cobertura, sin obra social, no les pagó los aportes. Los que lograron jubilarse están todos con la mínima…”, puntualizó.
“Me siento con obligación moral de ser la voz y la cara de ellos… este señor puede seguir enviando a todo el mundo cartas documento, intimaciones, bozales legales. Pero yo hablo por mí y por las 400 familias de la Mutualidad que este señor dejó afuera, con un sueldo mensual de 6 mil pesos. Estoy aquí por las 64 familias que dejó afuera del Sanatorio Argentino, familias que llevaban años trabajando antes de que llegue él. Estoy aquí por Alberto Lebbos y su lucha, espero que se haga justicia, y que todo se esclarezca” (en torno al crimen de Paulina), indicó.
“Ayer lo escuchaba hablando en un medio del delito de difamación. Le digo a Deiana que delito es dejar a la gente en situación de calle, sin cobertura… No pagar los impuestos es delito Daniel, no pagar los impuestos es delito… Delito es que vos caminés por la calle, que vos y tu hija caminen por la calle es delito… Todo lo que yo digo hoy es verdad y está pasado por escribano público, documentado y presentado como corresponde en el Palacio de Tribunales”, finalizó Scavarda.
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