La disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) fue oficializada este viernes por el Gobierno y la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) ocupará su lugar con un esquema que, según la administración del presidente Javier Milei, promete ser más simplificado.
“Disuélvese la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y créase la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA)”, establece el Decreto 953/2024, publicado en el Boletín Oficial. “Con el objeto de eficientizar los aspectos vinculados con la aplicación y fiscalización del régimen impositivo, aduanero y de la seguridad social, deviene necesario disolver la AFIP y crear la ARCA como ente autárquico actuante en el ámbito del Ministerio de Economía, que, con una estructura simplificada, contribuirá a optimizar su operatividad, garantizando una mayor especialización y eficiencia en la ejecución de sus funciones”, añade el documento.
Tras el anuncio, el Poder Ejecutivo aseguró que se ahorrarán alrededor de $6.400 millones, mientras que se reducirán las autoridades superiores en un 45% y los niveles inferiores de la estructura actual en un 35%.
El Gobierno dijo que la AFIP se ha “sobredimensionado tanto en su estructura organizacional como en la multiplicación de sectores que no desempeñan, estrictamente, funciones esenciales”. “Resulta adecuado efectuar la reestructuración organizativa con el objeto de alcanzar la máxima eficacia y eficiencia en la gestión recaudatoria”, definieron.
Las autoridades de la ARCA
Por medio del decreto se nombraron las autoridades que liderarán la ARCA. Florencia Misrahi seguirá al frente del organismo. Este puesto tiene una duración de cuatro años y permite renovaciones sucesivas, siempre que se haya cumplido con el plan de gestión del mandato anterior. También fueron designados Andrés Edgardo Vázquez, al frente de la Dirección General Impositiva (DGI), y José Andrés Velis, quien supervisará la Aduana.
El decreto establece un plazo de 60 días hábiles para que el titular de la ARCA presente una propuesta de normas y estructura organizacional. Por último recuerda que la reforma se ampara en la declaración de emergencia pública en materia administrativa, económica, financiera y energética, lo que permite adoptar medidas excepcionales para acelerar el proceso de cambio.
