El Gobierno reactivará en las próximas horas una “mesa técnica” para avanzar por decreto con distintos puntos de la ley Bases que quedaron frustrados cuando Javier Milei decidió retirar el proyecto del Congreso, además de acelerar otras normas que la gestión libertaria tenía el tintero para desregular la economía y reformar el Estado.
Federico Sturzenegger -que volvió a Buenos Aires tras participar de un seminario en la Universidad de Harvard- estuvo hoy en la Casa Rosada con los equipos de la Jefatura de Gabinete, mientras el Presidente permanecía en Olivos, trabajando y descansando. El economista, que fue uno (aunque no el único) de los padres intelectuales del mega DNU de Milei y de la “ley ómnibus”, tiene previsto participar de la primera reunión de la “mesa técnica” para avanzar con distintos aspectos de la ley frustrada por “otras vías”, anticiparon en Balcarce 50.
De esa “mesa” participará Sturzenegger con sus colaboradores (donde talla el economista Maximiliano Fariña) junto con el equipo de la Jefatura de Gabinete, encabezados por el segundo de Nicolás Posse, José “Cochi” Rolandi. Según pudo reconstruir LA NACION, se espera que de la reunión participen también el secretario de Legal y Técnica, Javier Herrera Bravo, y el asesor presidencial Santiago Caputo, que es la voz de Milei en esas reuniones y tiene poder de decisión en materia de estrategia política.
Leyes, decretos y regulaciones simples
Un trabajo similar al que se pretende encarar ahora se había hecho en la transición que separó al balotaje de la asunción presidencial. En esa época, el equipo técnico de Posse junto a Eduardo Rodríguez Chirillo (quien luego asumiría como secretario de Energía) y el staff de Sturzenegger debatieron qué reformas se harían por decreto y cuáles recalarían en un proyecto de ley. Fruto de ese trabajo fue que quedaron redactados, por un lado, el mega DNU y, por el otro, la “ley ómnibus”.
Fracasada la ley Bases (y frenado el capítulo laboral del DNU), la gestión de Milei se propone avanzar con algunas de las reformas frustradas utilizando otras vías, como los decretos o incluso la reglamentación simple. Dado que muchos de los capítulos de la ley Bases involucran cuestiones tributarias o penales (que solo pueden regularse por ley), se espera que el alcance de las reformas se modere sustancialmente. Eventualmente, algún capítulo podría volver al Congreso (se habla de aquellos que apuntan a la reactivación económica).
“Hay que definir qué va por decreto, qué va por regulación simple y, eventualmente, si hay que mandar alguna ley al Congreso bien puntual”, dijo una fuente oficial a LA NACION.
El Gobierno también tiene previsto avanzar con otros proyectos de desregulación y de reformas del Estado adicionales a todo lo que se conoció hasta ahora. Son temas que quedaron en la carpeta de desregulaciones que redactó Sturzenegger cuando colaboraba con Patricia Bullrich en la campaña presidencial y un paquete que luego hizo propio Milei antes de asumir.
“Hay que acordarse que en la ley Bases y en el DNU solo tocamos el 20% de lo que teníamos estudiado”, dijo a LA NACION un colaborador muy al tanto del trabajo que se comenzará a hacer en estas horas.
Fideicomisos y jubilaciones
Según fuentes de la Casa Rosada, entre los puntos a trabajar en el reencuentro de la “mesa técnica” podría figurar el capítulo vinculado a los fondos fiduciarios, que Milei calificó como “las cajas negras de la política”. El Presidente anticipó en una entrevista con LN+ que su intención es eliminar los fideicomisos por decreto. El debate de la ley ómnibus se trabó en este punto porque la Casa Rosada pretendía disponer a voluntad sobre los fondos fiduciarios, que implican una partida anual que oscila entre los 8.000 y 10.000 millones de dólares, con controles muy lábiles.
También se podría avanzar con el capítulo para promover inversiones (siempre y cuando no alcance a la esfera tributaria) y otras desregulaciones en distintos sectores económicos. “Hay temas de desregulación que pueden caminar por decreto o regulación simple, así que estamos evaluando cada uno”, dijo un importante colaborador oficial.
Agregó que, además, es posible que se retome sin pasar por el Congreso el capítulo vinculado a la cultura. “El sistema de subsidios del INCAA nos parecía bueno modificarlo por ley, pero en rigor podemos hacerlo por con la reglamentación propia del instituto”, advirtió.
En la mesa, en tanto, podría abordarse el asunto más urgente que dejó la caída de la ley, que es el de las jubilaciones. El artículo 106º proyecto frustrado proponía eliminar a la fórmula de movilidad actual y darle al Poder Ejecutivo todas las prerrogativas para actualizar discrecionalmente los haberes hasta que hubiese un nuevo cálculo. Pero la ley cayó y hoy sigue vigente la fórmula actual (que rige desde fines de 2020) y que es muy perjudicial para los jubilados en épocas de alta inflación.