El jueves de la semana que viene, el Insituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) dará a conocer el dato de inflación del mes de noviembre. En el Gobierno se entusiasman en que, después de cuatro meses, pueda romper el piso y ubicarse por debajo del 6%.
La inflación de 2022, hasta octubre, marca 76,6%. Si se la anualiza, alcanza el 88%. El Gobierno se esperanza con que noviembre estará por debajo del 6%. Lo mismo esperan para el último mes del año y, así, romper con la proyección del 100% o más que sobrevoló durante los últimos meses.
El entusiasmo del ministro de Economía, Sergio Massa, incluso ha sido mayor y así lo expresó en varias de sus últimas declaraciones al indicar que el objetivo será para alrededor del mes de abril del año que viene “que el dato inflacionario empiece con el número 3″. En ese marco, apuestan a la titánica tarea de bajar a la mitad el IPC de 2022, regresándola a números cercanos con los que Alberto Fernández inició su presidencia en diciembre de 2019.
Sin embargo, las estimaciones de los privados van a contramano del Gobierno. Proyectan que noviembre cerró con una inflación de 6,1% y que en diciembre subirá a 6,3% llegando al 99% anual. Mientras que para el año que viene pronostican una cifra similar: 99,7%.
En ese contexto, el secretario de Desarrollo Productivo del Ministerio de Economía, José Ignacio De Mendiguren, volvió a marcar la problemática de que “al que tiene trabajo no le alcanza la plata”.
En un año electoral, como el que viene, el foco en el poder adquisitivo de las clases medias y bajas será clave. A raíz de ello, De Mendiguren explicó este sábado en declaraciones a la AM 750 que parte de lo que se está recaudando a través de la segunda edición del “Dólar Soja” será para “mantener el poder adquisitivo”.
La lupa sobre los salarios no es casual, un reciente trabajo de la consultora Synopsis, elaborado por Juan Manuel Grosso, al que se pudo acceder, reveló que de los 13 grandes gremios (por cantidad de afiliados y “peso”), al menos 10 terminarían el año con mejoras salariales muy altas, pero sin poder ganarle a los precios.
A octubre, el promedio de las paritarias que se cerraron llegaron al 91% anual, mientras el mes pasado habría escalado hasta el 95%. Asimismo, en el décimo mes, el salario real de los trabajadores registrados marcó un mínimo en los últimos 15 años.
Por eso, al evaluar la foto del 2022 y aunque existen gremios que cerrarán el año paritario 2022 (que no siempre condice con el calendario) con aumentos superiores al 100%, gran parte de esos sindicatos terminarán con una caída de entre 5 y 20 puntos, según el alza y momento de acuerdo salarial alcanzado.