En un video que se viralizó ayer, se puede observar a un miembro de las fuerzas de seguridad que se encarga de la seguridad del presidente, rodeado de integrantes de la comunidad de pueblos originarios, entre los que se encontraba el ex intendente de Tafí del Valle y actual legislador provincial, Jorge Yapura Astorga. En ese marco, militantes del Movimiento Evita de Amaicha del Valle, denunciaron que el ahora legislador, atacó a un integrante de la custodia presidencial (se puede escuchar claramente en el video) que se encontraba en los Valles Calchaquíes.
Sucede que estaba prevista una posible visita de Alberto Fernández a Amaicha del Valle que finalmente no se llevó a cabo, lo que había generado expectativa entre los militantes y dirigentes de la zona.
En la grabación se lo escucha decir al custodio y señalar a Yapura Astorga como su agresor. También los militantes de Movimiento Evita, pudieron identificarlo. “Tendría que haberte dado un chirlo, por maleducado”, amenaza Yapura Astorga.
Este hecho no hizo más que demostrar que el legislador jaldista, hace gala de la impunidad con la que se mueve. Esto sucede cuando la corrupción tiene premio y no castigo. En esa línea, debe recordarse un fallo unánime e histórico de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia, donde quedó firme la Elevación a Juicio Oral y Público de Yapura Astorga, por lo que el legislador es un hombre público que se encuentra Procesado.
En ese sentido, en una provincia normal, no debería caber dilación ni postergación posible, ni vericuetos legales, ni prerrogativas judiciales o argucias que le permitan escapar del juicio oral y público. Como tampoco una increíble protección espuria de parte de la legislatura provincial. No obstante, ocurre eso justamente, el Poder Legislativo que conduce el vicegobernador Osvaldo Jaldo, le permite gozar de los fueros parlamentarios.
Pero, además, el expediente se encontraría totalmente paralizado, al punto de que, hasta el momento, no se habría sorteado la fecha en la que se llevará a cabo el juicio oral. Esto significa que la Justicia de Tucumán pareciera mirar hacia otro lado y dormir el sueño de los justos, cuando se trata de juzgar a políticos corruptos.
[su_note note_color=”#0A8C06″ text_color=”#ffffff” radius=”10″ class=””]Hace casi un año que quedó firme el fallo de elevación a juicio oral por los delitos de Enriquecimiento Ilícito, Coautoría De Los Delitos De Incumplimiento De Los Deberes De Funcionario Público, Negociaciones Incompatibles con el Ejercicio de las Funciones Públicas, Fraude en Perjuicio de la Administración Pública, Malversación de Caudales Públicos (Peculado) y Asociación Ilícita.[/su_note]
La Sala III Conclusional, el tribunal encargado de su juzgamiento, no informa la fecha de inicio del mismo, como así también, mantendría el expediente bajo cuatro llaves. Según trascendió que antes de llegar al juicio, ya habrían “desaparecido” varias fojas del expediente, lo que claramente beneficiaría al legislador procesado Jorge Yapura Astorga.
Justamente, este hecho le permite al legislador seguir actuando impunemente por la vida, como en este caso, donde se lo ve claramente amenazar impunemente a un miembro de seguridad nacional. Pero, a pesar de la gravedad de los delitos por los cuales Yapura Astorga deberá sentarse en el banquillo de los acusados, sigue ocupando su banca, “protegido” por los demás integrantes de la legislatura, que miran para otro lado.
Y es que pareciera que Jorge Yapura Astorga cuenta con la “protección” del presidente de la Cámara. De hecho, se los ve muy cómodos juntos cada vez que el vicegobernador realiza algún tipo de acto político o proselitista y el legislador integra la comitiva de Osvaldo Jaldo en los recorridos semanales (foto), lo que demuestra la cercanía del procesado y el vicegobernador.
En ese sentido, ya debería haber sido separado del cargo, por lo menos hasta que termine su proceso penal y así evitar posibles tráficos de influencias que habría en tribunales para evitar ser condenado. Sin embargo, la legislatura parece dispuesta a darle toda la protección necesaria. ¿Y por qué esto resulta repudiable? Porque además de inmoral e ilegal, resulta peligroso.
Y la razón para afirmarlo es que, en un comunicado que posteó luego, Jorge Yapura Astorga, lejos de negar los hechos de los que se lo acusan, reivindicó su accionar, y sugirió que el manzurismo y el mandatario nacional habían utilizado como excusa el encuentro con los miembros de los pueblos originarios para hacer un acto político. “Siempre voy a defender y reivindicar nuestros pueblos originarios, como lo hice hoy”, afirmó sin ponerse colorado, Yapura Astorga, con un tono que sonó a amenaza.
Esto es lo que se logra cuando no hay Justicia de parte de los tribunales y cuando se protege desde un poder del Estado a un procesado por corrupción, termina haciendo gala de la impunidad con la que se mueve.
¿Los demás integrantes de la legislatura solicitarán sanciones por este accionar patoteril de un representante del pueblo o mirarán para otro lado cuando se trata de uno de ellos?