Un total de $ 2.000 millones que habían sido presupuestados por la Provincia para hacer transferencias a instituciones culturales y sociales sin fines de lucro fueron reasignados para una partida mediante la cual se giran fondos no reintegrables para municipios y comunas.
El movimiento de los fondos se autorizó el 1 de marzo, a través del Decreto N° 598/3 (SH) que se publicó hoy en el Boletín Oficial (BO). Allí se precisa que la Secretaría de Coordinación de Municipios y Comunas Rurales, dependiente del Ministerio del Interior, tramitó un incremento presupuestario para la Partida Subparcial 572 (Otras transferencias a Municipalidades y/ Comunas), una de las partidas que utiliza el Poder Ejecutivo (PE) para girar las asistencias para distritos del interior, procedimiento autorizado legalmente.
En el documento, que lleva la firma del gobernador Juan Manzur, se señala que corresponde realizar una adecuación de crédito presupuestario para incrementar la referida partida. Para ello, se extrajo $ 2.000 millones de la Partida Subparcial 517 (Transferencias a otras instituciones culturales y sociales sin fines de lucro) para reubicar esos fondos. Se añadió que el decreto fue refrendado por el ministro de Economía, Eduardo Garvich, y el Secretario de Hacienda, Fernando Enrique Solórzano.
El Manual de Clasificadores de Presupuestarios de la Provincia define a la partida 517 como “subsidios destinados al auxilio y estímulo de acciones de índole cultural y social realizadas por instituciones de carácter privado sin fines de lucro”.
Los $ 2.000 millones que se reasignaron representan un 10% del total de aportes financieros no reintegrables que autorizó el Gobierno durante 2022 a través de casi 200 decretos ($ 20.073 millones).
Disparidad y cruces
El año pasado, los 15 distritos administrados por el oficialismo y los cuatro que están al mando de la oposición recibieron este tipo de aportes financieros el año pasado. Sin embargo, el reparto de estos dineros se dio de modo dispar, habiendo sido favorecidos especialmente aquellos que tienen idéntico signo político que la Casa de Gobierno.
La mayoría de los decretos mencionan que los dineros están destinados para obras, pero son muy pocos los que se brindan un detalle pormenorizado sobre las tareas en sí.
La disparidad en la distribución de fondos no reintegrables despertó duras críticas de la oposición, especialmente de parte del alfarismo. Distintos referentes del Partido por la Justicia Social (PJS), que preside Germán Alfaro, manifestaron que aquellas asistencias financieras se distribuyeron con fines electorales
Uno de los últimos cruces al respecto lo protagonizaron el legislador Raúl Pellegrini (PJS) y el intendente de Banda del Río Salí Darío Monteros (FdT). El parlamentario expuso que el municipio del este recibió dineros suficientes como para asfaltar toda la ciudad y que eso no se percibe en el nivel de obras. El jefe municipal, en tanto, lo acusó de mentiroso y remarcó que en Banda del Río Salí hay obras hechas y que se brindan prestaciones en salud y educación, entre otras.
Los municipios que fueron más favorecidos en 2022 a través de este tipo de asistencias fueron Banda del Río Salí, Famaillá, Alberdi y Tafí Viejo con $ 3.885 millones, $ 2.358 millones, $ 1.920 millones, $ 1.870 millones y $ 1.550 millones, respectivamente. En el otro extremo de los giros no reintegrables durante el año pasado se ubicaron Concepción, Yerba Buena, Bella Vista y San Miguel de Tucumán con $ 65 millones, $ 62 millones, $ 59 millones y $ 35 millones, respectivamente.
En Casa de Gobierno sostienen que los fondos no reintegrables pueden ser gestionados por cualquier jefe municipal puede gestionar y que todos tienen un destino específico. Algunos opositores, en cambio, disienten con la metodología, a pesar de que está habilitada por ley. Sostienen que es arbitraria y discriminatoria. Hasta hay quienes deslizan que esos desembolsos podrían tener otros fines.