
El objetivo formal del encuentro fue definir una estrategia por la situación de Cristina Kirchner, pero también sirvió para debatir lo electoral
LA PLATA.– El peronismo reunió hoy a los partidos aliados que conformaron Unión por la Patria en las últimas elecciones para avanzar con la estrategia a desarrollar por la libertad de Cristina Kirchner, la expresidenta presa en su domicilio con una condena judicial a seis años de prisión.
Participaron del encuentro en la sede de la calle Matheu dirigentes del PJ, Kolina, Nuevo Encuentro, Patria Grande y el Frente Renovador, entre otros de los actores del frente que formó Unión por la Patria en 2023.
No participa, en cambio, Axel Kicillof. Pero sí asistió Mario Secco, aliado incondicional del mandatario provincial que tiene el sello del Frente Grande. La presencia del alcalde de Ensenada no fue causal: supone la exploración de una alianza donde finalente quedará integrado el movimiento de Kicillof. Secco asistió con otro aliado del gobernador: el sindicalista estatal Oscar de Isasi, referente de ATE en la provincia.
“Todos los partidos están preparados para armar sus congresos con vista al frente electoral”, señaló a modo de conclusión uno de los participantes del encuentro a LA NACION. Es decir, se acordó reconstruir el frente electoral tras la derrota de 2023. La oficialización del nuevo acuerdo podría concretarse la semana próxima, en un congreso partidario.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires llamó el lunes por la noche a una mesa de unidad con todos los sectores de Unión por la Patria para cerrar listas de cara a los comicios del 7 de septiembre. Ayer hubo una reunión preliminar, secreta, en la Casa de Gobierno.
Nicolas Aboaf
Esa reunión de unidad para fortalecer un frente electoral “sin vetos”, que Kicillof esperaba que se hiciera antes del desembarco del presidente Javier Milei ayer en la ciudad de La Plata, nunca se concretó.
En cambio, el Partido Justicialista, que responde a Cristina Kirchner, se reúne hoy con mayoría de protagonistas de La Cámpora y del peronismo bajo la conducción de Máximo Kirchner.
Con el calendario electoral en tiempo de descuento para el cierre de alianzas, que vence el 9 de julio, Kicillof asignó el día de hoy a hacer campaña por el interior de la provincia de Buenos Aires: visita primero Chascomús, luego San Cayetano y finalmente General Pueyrredón, desde donde encabezará un acto.
Ayer, mientras Milei copaba con todo su gabinete la ciudad de La Plata, Kicillof se mostró en Ensenada, considerada la cuna de peronismo, en la tercera sección electoral.
A la noche citó a la Gobernación a algunos de los intendentes que funcionarán como representantes de dialogo entre los distintos sectores: entre ellos a Federico Otermín (Lomas de Zamora), Mayra Mendoza y Mario Secco en la Casa de Gobierno de La Plata. De allí surgió la posibilidad de que la mesa de negociación por las listas finalmente tenga lugar entre el domingo y lunes próximo.
Lo cierto es que Kicillof esperaba tener avanzada la unidad a la que aspira antes del desembarco de Milei. Y encontró dilaciones por parte de los socios que responden a Máximo Kirchner y Sergio Massa. Por estas horas, esos dos espacios mantienen diálogo más fluido entre sí de cara al cierre de alianzas. De la reunión de hoy es parte Rubén Eslaiman en representación de Massa.
Kicillof hace equilibrio para bregar por la unidad, pero quiere mostrarse como un espacio autónomo. Y estos gestos de autonomía y liderazgo irritan al kirchnerismo puro.
La conformación de alianzas es el primer paso, que comenzó a discutirse hoy en Matheu, a instancia de Kirchner.
En los próximos días debería reunirse la mesa de unidad para afianzar las reglas con que buscaran armar listas para el 19 de julio.
La semana que pasó marchó junto a alcaldes, movimientos sociales y centrales obreras del Movimiento Derecho al Futuro para denunciar la “proscripción” de la expresidenta, que quedará detenida seis años con prisión domiciliaria. La marcha fue una demostración de fuerza hacia adentro, más que una declaración hacia afuera. Kicillof evitó posicionarse como adlátere de Máximo Kirchner y buscó mostrarse como un diferente dentro del mismo espacio, ahora movilizado por la centralidad de la expresidenta.
Santiago oroz
El mandatario provincial, que es desconocido y relegado a un segundo plano por Máximo Kirchner en los actos de apoyo a Cristina, a su vez se posiciona como par e interlocutor de la expresidenta. No de su hijo, pese a este momento de centralidad del diputado nacional.
Los dos diálogos con Cristina Kirchner antes de su detención domiciliaria sellaron la base para una mesa de negociación que se demora.
Kicillof dejó saber que designará alcaldes y ministros en su representación para acordar condiciones para integrar las listas que cierran el 19 de julio.
Estaba previsto que algunos intendentes afines al gobernador participaran del encuentro del PJ en la calle Matheu, tal como ya sucedió tras la detención de Cristina Kirchner.
“Es una reunión por la causa de Cristina libre. No es una reunión electoral”, dijeron al lanzar la convocatoria desde el kirchnerismo. Pero aún sin Kicillof, hoy podría registrarse un inicio de conversaciones informales.