El intendente de Yerba Buena, Mariano Campero, dejó en claro durante el fin de semana sus expectativas para las próximas elecciones y, además, comentó su visión sobre el espacio de Juntos por el Cambio. “Soy consciente que para ganar las próximas elecciones tenemos que ser francos y directos. Hay que armar equipos y fórmulas, siempre trabajando para Tucumán. Las diferencias en los resultados hay que dirimirlos”, manifestó.
En esa línea, dijo que “el objetivo colectivo de JxC es generar un equipo y ganar en las elecciones”. “Hoy tenemos una oportunidad única. En lo local queremos que se vea el trabajo que hacemos, tenemos que seguir con nuestra coherencia. Mi rol es intentar hacer la mejor elección y que Sánchez sea gobernador”. Campero aseguró también que “hay que consolidar Juntos por el Cambio, sin cerrar las puertas a nadie”.
De hecho, esa frase fue la introducción a lo que en el círculo íntimo del mandatario municipal consideran que será el plan B de Mariano Campero si no puede avanzar en pos de dejar al alfarismo reducido. Para ello, estaría preparando en silencio y desde las sombras un pacto con Ricardo Bussi y que podría incluir a alguno de los dirigentes que militan dentro de Fuerza Republicana.
Es por ello que dijo que “sería positivo tener candidatos de Fuerza Republicana, como Nadima Pecci, pero sé que es algo que hace ruido”. Pero cabe agregar que esa frase demuestra lo alejado que está Mariano Campero de Juntos por el Cambio. Y es que la legisladora ya forma parte de JxC y su incorporación a esta coalición se produjo en la última reunión celebrada a fines del año pasado para mostrar una unidad.
La misma unidad que a todas luces parece ficticia. Si Mariano Campero no se dio cuenta de que Nadima Pecci ya integra JxC es porque, justamente, tal y como lo informó en su momento Tucumán Despierta, el propio intendente de Yerba Buena fue el único que no asistió a esa reunión en la que estuvieron presentes, entre otros, Germán Alfaro y Beatriz Ávila, sus archienemigos en la coalición.
Por último, Mariano Campero decidió opinar de lo que sucede en la vereda de enfrente y analizar la interna dentro del peronismo provincial. Dijo que, si no hay algún cambio, “como candidato del oficialismo podría ser elegido Osvaldo Jaldo”. “Si vuelve Manzur puede ser que no lo sea, pero se dieron cuenta que la interna no es positiva para ninguno de los dos. Ese aprendizaje los obligó a no cometer los mismos errores, el año 2022 será un año tranquilo”.