El sol no quería guardarse entre las montañas, sino seguir iluminando un rato más la tarde del jueves 9 de enero de 2020. Ese capricho obligaba a Francisco Caliva (alias “Pancho”, 40 años) a improvisar una visera con las manos. Enfrentado a los rayos que golpeaban la mesa de La Quebradita, el café célebre por sus alfajores de dulce de leche, el intendente justicialista de Tafí del Valle planteó sus ideas y propósitos para la gestión que comenzó en noviembre, en medio de controversias, y aseguró que él hará efectivas las normas. “No impondré mi decisión ni atropellaré, sino que vamos a hacer cumplir las ordenanzas que tenemos”, dijo a LA GACETA el sucesor del hoy legislador Jorge Yapura Astorga.
El celular no dio respiro a Caliva, pero él no lo atendió. Al comienzo de la entrevista, comentó que los problemas son algo normal en la función pública: ese mismo día él había estado atajando las quejas referidas a la instalación de las carpas del boliche Recórcholis en el km 61 de la ruta 307. El intendente inició su mandato con un Concejo Deliberante dominado por la oposición que lidera Jéssica Yapura Astorga, ex funcionaria e hija del jefe municipal anterior, que aún no pudo sesionar -necesita al menos la presencia de un edil afín a la Intendencia para lograr el quórum-. De modo que no faltan los conflictos y las chispas en la primera villa turística de la provincia, que enfrenta una coyuntura crucial para su futuro. Caliva se muestra convencido de que podrá superar algunas dificultades críticas, como la proliferación de la venta informal, y aseguró que esta será la última temporada con ambulantes en la vía pública (se informa por separado).
Acompañado por su asesor y mano derecha, el empresario Daniel Carrazano, y Ramona Córdoba, esposa de este, y encargada de Prensa y Difusión, el jefe municipal pidió paciencia y respeto, y trazó dos fechas: julio para presentar ideas y noviembre para plasmar los primeros cambios. Aunque prometió austeridad y transparencia, no quiso hacer comentarios sobre el audio con ofrecimientos de dinero y otras ventajas al concejal opositor Juan Carlos Rivadeneria que le adjudican. Sí, en cambio, se refirió a aquel discurso en el que dijo a los municipales que podían ir a trabajar “‘quemao’, pero no ‘machao’”. “Se burlaron de nuestra habla… ‘Resaca’ queda más delicado para los finos”, expresó (se informa por separado).
-¿Cómo abordará los conflictos que enfrentan a los distintos sectores tafinistos: lugareños, veraneantes, empresarios, oposición..?
-No se trata de decisiones que uno toma sino de hacer respetar las ordenanzas que tenemos. Yo les decía hoy (por ayer) a la Cámara de Propietarios de Hoteles y Afines que el 22 de diciembre pasado se instaló un parque de diversiones al lado de la estancia Los Cuartos. Nosotros sabíamos que gestiones anteriores lo habían habilitado y el dueño vino con una copia de la resolución, pero vimos que el negocio estaba en la Zona Residencial 1 (R1) y eso no corresponde. Yo vengo a hacer respetar (las zonas) y, por ello, le pedí a este señor que saque el parque y tuvimos la suerte de que accedió. El hombre perdió plata porque hizo un movimiento importante: los juegos ya estaban casi armados. Ese día 2 de enero visité la estancia Los Cuartos y me mostraron el museo impresionante que están por inaugurar, que es de alto nivel y va a ser algo imponente: sé que lo abren en estos días. La dueña se quejaba del parque y entonces yo le dije que lo estaban sacando. Ella no lo podía creer. También teníamos el problema de Los Castaños y del boliche de ahí (Recórcholis), que también estaba en la R1. Nosotros les dijimos que busquen otro espacio donde puedan hacer esos eventos. Y ellos se fueron a la par del Complejo Democracia: las ordenanzas dicen que ahí sí se puede, aunque no prevén la cuestión acústica. Si ellos presentan la carpeta técnica con todos los papeles, la habilitación será aprobada. Nosotros les informamos eso a los cabañeros (que reclamaron): sus construcciones deben estar retiradas cuatro metros del fondo y de los costados, y a veces “hacen abusos” y las pegan (a los límites de la propiedad). Hay muchas cosas que no se ven y que sólo se dicen cuando les afecta…
-¿Usted afirma que los hoteleros ven el abuso del otro y no el propio?
-Yo invité a los hoteleros a que nos tengan un poquito de paciencia porque nosotros llevamos dos meses y días de gestión. El Tribunal de Faltas está creado, pero no en funcionamiento. Ahora hay que poner la persona a cargo. Ayer (por el miércoles) hemos elaborado un decreto para empezar a armar esto. Es un proceso, un dirigirse a la gente para transmitirle nuestra forma de laburar: no queremos atropellar. Tenemos que ver cómo crece Tafí. Nuestro planeamiento urbano es de 1987, y necesitamos renovarlo junto con el hotelero, el cabañero, el artesano, el comerciante… será la forma de que haya participación y representación. Necesitamos un poquito de paciencia pero para julio tenemos que demostrar qué Tafí queremos: a dónde apuntamos.
-¿Por qué pone la meta de julio?
-Porque al Tribunal de Faltas lo vamos a cubrir ahora para implementarlo en mayo. Queremos mostrar las ideas que trabajamos con la gente en las vacaciones de invierno. En Tafí nos quejamos si no podemos estacionar al frente del negocio al que vamos a comprar, pero resulta que el parque automotor creció en forma impresionante. Digo yo, ¿por qué no caminar? Yo fui a Cafayate y tuve que dejar el auto a cinco cuadras para llegar al parque artesanal, y caminé. Entonces, hay que ser pacientes. Nosotros mismos renegamos cuando a San Miguel (de Tucumán) echamos una hora y 20 (minutos) hasta la Terminal, y de ahí echamos 45 minutos para ir al centro por la carga de tránsito que hay. En Tafí va a pasar lo mismo porque es chiquito. Nos dicen que la ocupación hotelera está al 65%, pero vemos la ruta llena porque, por la situación económica, mucha gente viene por el día, no se queda a dormir. Nosotros también queremos regular los hospedajes informales, que son las piecitas que alquilan en las casas: queremos que paguen un canon y que tengan seguridad para que no compitan desparejo con los que pagan impuestos. Usted decía recién que Tafí del Valle es bello: nosotros tenemos el logo “Tafí del Valle somos todos” porque juntos lo vamos a hacer hermoso. Con mi criterio personal no haré nada, sino que debo escuchar a los demás. Queremos que la gente que invirtió se quede.
-Marcela Funes Franco, presidenta de los Hoteleros, dijo que ustedes habían recibido una Municipalidad devastada. ¿Qué opina usted?
-Recibimos las cosas a un 80%, no al 100 por 100. No voy a decir que estaba devastada porque no es ese mi pensamiento. La Municipalidad estaba funcionando al 80% de su capacidad.
-¿Y qué implica ese 20% restante?
-Faltaban arreglos en algunas máquinas, pero es lo normal.
-Intendente, usted dice que su función es hacer cumplir las ordenanzas vigentes. Pero esas ya existían antes y se ven abundantes carencias de control. ¿Por qué cree que su gestión será diferente y habrá un crecimiento más ordenado?
-Va a ser distinto porque haremos un nuevo Código de Planeamiento Urbano con la participación de las distintas áreas para que definamos pacientemente qué Tafí queremos. Creo que así podremos hacer algo diferente a lo que hay.
-Otra preocupación es la cantidad de animales sueltos que circulan por las rutas y caminos…
-Estamos trabajando con la Policía y el Superior Gobierno de la Provincia por medio de los ministros (Miguel) Acevedo, (Claudio) Maley y (Rossana) Chahla para que este verano, Dios y la Virgen lo permitan, sea normal para quienes nos visitan y para nuestra gente también. Queremos que no haya accidentes porque a todos nos duele y, si pasa algo, afecta la imagen de Tafí. Es verdad que el animal no debe estar en la ruta, pero también hay que respetar esa cultura. Eso es lo nuestro: el que viene debe ser cuidadoso. Nosotros estamos por comprar dos motos para que transiten por la ruta durante las 24 horas y saquen los animales para evitar que los lleven a San Miguel porque cuesta traerlos. El lunes, si Dios quiere, tendremos las unidades.
-Usted acaba de mencionar la palabra “cultura”. Esta semana, Solano Peña, dueño del casco de la estancia Las Tacanas, pidió una política cultural, y un centro de enseñanza y de exhibición del arte local. ¿Usted podrá hacerlo?
-Por supuesto. Tafí del Valle tiene la categoría de ciudad turística y año a año debe presentar proyectos para mantenerla, si no, se cae. Tenemos maestros de la piedra y del violín… aquí está un amigo, Daniel Carrazano, que en su época de concejal creó una escuelita de música en la que está participando gente grande, que tocaba de oído. Acá también tenemos la cultura del deporte, que es sagrada.
-Sí, hay tantas canchas de fútbol como capillas…
-Así es. Fui presidente durante ocho años de la Liga de Fútbol. Y nosotros queremos que nuestra gente se sienta identificada con su lugar. Muchos amamos Tafí y eso me da la fuerza. Ahora, si de aquí a noviembre no hacemos el cambio que hace falta, con razón estarán decepcionados de mí.
-En el momento previo a que usted asumiera trascendió un audio que le adjudican donde habría ofrecimientos de dinero para el concejal opositor Rivadeneira…
-Cero (hace el gesto con los dedos).
-¿No quiere hablar de eso?
-No (hace el gesto con la cabeza).
-¿Qué opina de las medidas de austeridad y recorte presupuestario del Gobierno provincial, y a las que se están uniendo otros municipios e instituciones públicas?
-Nos tenemos que adaptar para seguir trabajando. Ya nos comunicaron el ajuste que se viene. Así como el gobernador Juan Manzur tuvo la disposición de dar el “plan gatillo” a los trabajadores públicos, que hacía que los sueldos aumentaran con la inflación, ahora tenemos que acompañarlos en las malas.
-¿Usted qué medida de ahorro promoverá?
-Seguramente obras no podremos hacer, pero sí vamos a tratar de seguir con las tareas de mantenimiento de veredas. En Tafí del Valle pasa la temporada, y la gente se queda sin el trabajo que daban los hoteles y restaurantes. Tenemos que ver cómo contenemos a esos tafinistos.
-¿Cuántos agentes tiene la Municipalidad?
-567.
-¿Qué iniciativa propone para aumentar la transparencia de su institución?
-Vamos a comenzar con un boletín oficial que transparente la gestión pública. Yo creo que la transparencia lleva claridad sobre las personas.
-En cuatro años, cuando volvamos a encontrarnos, ¿qué le gustaría poder decir?
-Quiero que la gente que me eligió esté contenta con el trabajo que hicimos en este período con la familia municipal; que lo que hablamos se cumpla por lo menos en un 80% y que eso lo vean quienes nos visitan. Si confían nuevamente en mí, estaré a su disposición.
Frase polémica: “estaba hablando de la manera en que hablamos en el valle”
El intendente defendió la expresión “‘quemao’, pero no ‘machao’” que usó para transmitir a los agentes municipales cómo esperaba que se presentaran a trabajar. “Estaba hablando de la manera en la que hablamos en Tafí del Valle. Es nuestra habla y cómo nos entendemos aquí, así como otros tienen el ‘che’. Se burlaron y lo tomaron como que no sabemos hablar, y no es eso. ‘Resaca’ queda más delicado para los finos. Nosotros somos transparentes y decimos ‘quemados’: puede venir ‘quemado’, pero no machado”, insistió.
Comercio: “este es el último verano con vendedores ambulantes”
Francisco Caliva prometió que las próximas vacaciones habrá mercados asignados y no puestos de venta informal instalados en las calles de la villa de Tafí del Valle. “Nos están pidiendo espacios para artesanos que existen en todos lados. Nosotros dijimos a los vendedores que esta es la última temporada en la que podrán ocupar el espacio público. Después irán a los espacios que nosotros armemos”, prometió el intendente. Calculó que el problema llevaba al menos 16 años de existencia, pese a las normas que prohiben la actividad. “La gente necesita laburar, pero también debemos respetarnos mutuamente. Debe ser respetado aquel comerciante que paga en forma sagrada sus impuestos durante el año: el que viene un par de meses tiene que comprenderlo”, explicó.