El precio internacional de la soja alcanzó un nuevo récord en el mercado de referencia de Chicago. La posición mayo, que está por vencer, cotiza en estos momentos a USD 601, 50 la tonelada, algo que no sucedía desde agosto de 2012. Además, la posición con vencimiento en julio próximo también sube y cotiza a USD 593,80 la tonelada.
Mientras tanto, según los especialistas de FyO, en Rosario el valor que reciben los productores equivale a USD 212 la tonelada.
El precio por encima de los 600 dólares la tonelada, en un contrato que está a días de su vencimiento y no empieza a tener importancia en el mercado, es una clara señal que la oleaginosa viene desde hace tiempo en el contexto externo con valores a la suba. Todo esto beneficia al Gobierno porque habrá un mayor ingreso de divisas por las exportaciones, mientras que el productor argentino no recibe dicho precio, por los efectos de las retenciones y el desdoblamiento cambiario.
Por otro lado, suben los precios de los cereales: el maíz aumenta su precio un 2,38% y cotiza a USD 301,6 la tonelada y el trigo sube un 2,72% y la tonelada se paga a USD 280.
Según el reporte de la Bolsa de Comercio de Rosario, la soja sube por compras técnicas y la solidez evidenciada en el mercado de harina/pellets de soja.
Por el lado del trigo, los incrementos de los valores están relacionados al informe del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos que reflejó que casi el 50% del cereal de invierno se encuentra entre bueno excelente. Y por último, el maíz cotiza en terreno positivo por compras de oportunidad.
Cosecha local de soja
Hasta el momento los productores de soja de nuestro país han cosechado casi el 60% del área sembrada que alcanzó los 16,7 millones de hectáreas. La parte final de la campaña de la oleaginosa está provocando un mayor ingreso de camiones en la zona de las plantas procesadoras y portuarias. Según los datos aportados por Williams Agronegocios, el mes pasado ingresaron 173.229 camiones, de los cuales el 45,3% transportaban soja y el 70% descargaron producción en los puertos del Gran Rosario.
A todo esto, un relevamiento realizado por el Instituto de Tecnología Agropecuaria (INTA) determinó que en la presente campaña de soja las pérdidas por cosecha alcanzaron hasta el momento los 142 kilos de grano por hectárea, como consecuencia de la velocidad de avance de la cosechadora, la planta inclinada, etc.
Dicha pérdida representa el 25% del margen neto de producción, y teniendo en cuenta los valores actuales de la soja, son unos 1.292 millones de dólares de pérdida para toda la cadena de valor, que incluye desde el productor y hasta el fisco.
Para los especialistas, es importante tener en cuenta que gran parte del esfuerzo y capital invertido desde el momento de la siembra puede perderse en solo unas horas si no se invierte tiempo en trabajar al momento de la cosecha, aplicando los consejos técnicos y las metodologías que propone el INTA para evaluar pérdidas.
La propuesta del INTA es lograr reducir los valores promedio actuales de pérdida en un 20%, aumentando el saldo exportable del país en 258 millones de dólares. Para lograr este objetivo, el organismo propone que los nuevos valores de tolerancia fijados sean de 75 kilos por hectárea como límite. Según se consignó, “cosechar soja con eficiencia es un elemento clave en la unidad productiva, ya que repercute directamente en la rentabilidad del cultivo”.