El asesinato del empresario de Andrés Blaquier en la Panamericana el último fin de semana, para robarle su BMW no fue un caso aislado. En los últimos 10 años, el robo de motocicletas a nivel nacional se duplicó. Y en paralelo, en el mismo período, la compra de motos se redujo a la mitad. Así surge del análisis que hizo Infobae de los datos de robos que surgen del informe elaborado por la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN), en base a lo reportado por las entidades aseguradoras a los sistemas IRIS (Sistema de Control de Fraude) y PrismaNET(Plan Estadístico del Ramo Automotores), y de las inscripciones de motos del Registro Nacional de la Propiedad Automotor, publicadas por el Ministerio de Justicia de la Nación.
Entre 2012 y 2021, el robo de motos en todo el país pasó de 10.472 a 20.947, mientras que las inscripciones de motos en los Registros del Automotor registraron una tendencia a la baja: en 2012 se inscribieron 686.389 motocicletas, y en 2021 fueron apenas 395.144, un 50% menos.
Este crecimiento del 100% de los asaltos de motos en la última década no se repite con otro tipo de vehículos. El robo de autos bajó un 19%; el de camiones, 57%; el de transporte de pasajeros, un 33%, y el de taxis, un 10%, según el informe mencionado. Los únicos otros dos tipos de vehículos que aumentaron, además de las motos, son las camionetas y los remises, pero en porcentajes mucho menores: 19% y 29% respectivamente.
Infobae requirió los datos de robos de motos actualizados a este año, discriminados por distrito, al Ministerio de Justicia de Nación -de quien dependen los Registros del Automotor -, pero desde esa cartera respondieron que “están procesándose para ser publicados” y que “no podían facilitarlos en este momento”.
“Trofeos de caza”
El robo de motos creció a la par de otro fenómeno: el asalto a motociclistas de rodados de altas cilindradas para quedarse con sus vehículos, aunque no tengan un canal de reventa ilegal. Esteban Grimalt especialistas en motos, que viene alertando en sus redes sobre los robos de motocicletas en autopistas y accesos del Gran Buenos Aires, dio más precisiones ante Infobae: “El mercado negro sigue existiendo en las motos comunes, que terminan generando el volumen de partes. Pero las de alta gama no se venden en el mercado negro, como mucho pueden hacer un canje entre ellos (los asaltantes). Ningún usuario de una moto que vale USD 45.000 va a ir a Marketplace (una plataforma de venta de artículos online de Facebook), donde se venden gran cantidad de cosas robadas. A lo sumo, si no consigue algo por la falta de repuestos importados, se lo hace traer de afuera porque tiene recursos”.
Desde el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires coincidieron, ante la consulta de Infobae, en que “es raro que quien compra una moto de alta gama compre repuestos robados, y es muy difícil vender una moto de ese estilo. La mayor cantidad de motos robadas son de bajo valor”.
¿Cuál es el motivo entonces del aumento del robo de motos de alta gama, como la BMW de Blaquier, las Triumph o las Ducati, con un valor de mercado que va de los USD 20.000 a los USD 60.000? Su exhibición como un “trofeo” en grupos vinculados al delito para “alardear” y “ganar jerarquía”. Para acceder a ellas, los delincuentes recurren a modalidades cada vez más violentas. “Te tiran a las piernas. Nos están cazando”, afirmó Grimalt, quien en su canal de Youtube (EGvideos) denuncia la situación que están viviendo los motociclistas, y recoge testimonios de víctimas de robos de sus vehículos.
Andrés Grimalt, especialista en motos (Crédito: Captura LN+)
Grimalt apuntó a otro factor que explicaría el aumento de los asaltos a motociclistas para quedarse con el rodado: la “impunidad” que rodea a este tipo de delitos, especialmente cuando no hay una víctima que pierde la vida o queda malherida. “Al darse cuenta el que roba motos chicas que no le pasa nada y no tiene ninguna penalidad, va por motos de alta gama”. En ese sentido, explicó que cuando la Policía detiene a alguien con una moto robada, la figura legal que le aplica la Justicia es la de encubrimiento de otro delito (el robo) cuyo autor se desconoce, o no se puede probar que sea el que la manejaba. “Si lo agarran con moto sin documentación, o con pedido de captura, le hacen una causa por encubrimiento y a las dos horas está libre. Le sacan la moto, pero el chorro sale después a buscar otra, si ya sabe que no le va a pasar nada. Se está generando un círculo vicioso”, señaló.
Sin embargo, desde el Ministerio de Seguridad bonaerense que conduce Sergio Berni aseguraron que los números “vienen bajando” desde 2019. Según los datos provistos por la propia cartera a Infobae, este delito pasó de 29.170 hechos en 2019, a 25.371 en 2021. A septiembre de este año, los robos de motos en la Provincia suman 18.983. No informaron datos del 2020 por haber sido “un año atípico” por la pandemia. “En general, según el análisis de la Procuración (de la Provincia de Buenos Aires) y los datos que manejan e hicieron públicos, la mayoría de los delitos descendieron. Siguen siendo muchos, pero en porcentajes y cantidades descendieron”, señalaron.
Berni quedó en el centro de la polémica por el episodio de Blaquier, y en conferencia de prensa apuntó este lunes a la Justicia por no haberlo detenido anteriormente pese a sus antecedentes. Aseguró que se trataba de “una crónica de una muerte anunciada”, aunque confundió su nombre y prontuario con el de otro imputado.
Sergio Berni apuntó a la Justicia por la libertad del acusado del crimen de Andrés Blaquier
Robos cada vez más violentos
Blaquier cayó al suelo el sábado sobre el final de la tarde en el kilómetro 50 de la Panamericana, por el impacto de un tiro en el pecho. Lo recibió cuando intentó acelerar y escapar de dos motochorros de 18 años que lo venían persiguiendo en una moto marca Benelli. Ingeniero agrónomo y miembro de la familia Blaquier, una de las más ricas del país y dueña del ingenio azucarero Ledesma, falleció pocas horas después en un hospital de la localidad de Pilar.
El joven señalado como su asesino, Luciano Jesús González, fue filmado por las cámaras de seguridad y apresado al día siguiente. También fue detenida la joven que lo acompañaba y que habría conducido la moto para ejecutar el robo, Brisa Villarreal.
Campaña para juntar firmas luego del asesinato de Blaquier
Grimalt destacó el aumento de la violencia alrededor de los asaltos a motociclistas por los testimonios que viene recogiendo de otras víctimas de este delito, que se da principalmente en autopistas y accesos en el Gran Buenos Aires. “Por el aumento de robos, muchos usuarios de motos están saliendo a la calle armados y los ladrones están cada vez más agresivos, quieren anticipar el tiro, antes de que se lo coman ellos. Se te ponen a la par y te tiran a las piernas para que pares o te caigas, y tener tiempo para agarrar la moto y escaparse. Es como si salieran a cazar, para después sacarse una foto con la presa y mostrarla en las redes sociales”.
Según este experto en el mundo de las motos, desde hace un año y medio, la situación empeoró. “Todos los accesos del conurbano hoy son tierra de nadie. No hay controles en ninguno, ni se ven policías, aún siendo lugares muy transitados. Yo tengo una moto para salir de travesía, y la subo en la camioneta y me la tengo que llevar 250 km para arrancar mi viaje desde ahí, por una cuestión de seguridad. Vivo en Vicente López y no puedo salir por ningún lado. Antes la Panamericana estaba alejada de estas acciones y se convirtió en uno de los lugares más peligrosos. Hoy, después de lo que pasó con Blaquier, están las autopistas llenas de policías y los delincuentes están guardados. Pero tuvo que haber un asesinato. Si no hay un plan de acción real de acá en más, en 10 días van a volver”.
¿De quién cree es la responsabilidad sobre la falta de controles que ve en los accesos?, le preguntó Infobae. “Es netamente una decisión política. La Policía está ausente, no hay directivas del Ministerio de Seguridad para combatir el delito. Y la Justicia encontró este gris de la figura del encubrimiento y a los ladrones de motos -en los casos en que sean detenidos- los dejan sueltos a las pocas horas. En muchos casos son menores, pero a los mayores también”, respondió sin dudar Grimalt.
Más allá de la suba de las cifras de robos de motos a nivel nacional en la última década, en la Ciudad de Buenos Aires también informaron que los casos están este año a la baja, de acuerdo con los datos provistos a Infobae por el Ministerio de Seguridad porteño. En lo que va del 2022, se produjeron 228 sustracciones de motos. Si se proyecta ese número para finales del corriente año, el número ascendería a 304. Es un 15% más que en 2019, cuando el número de motos sustraídas fue de 265. Al año siguiente, el de la pandemia, la cifra bajó a 172 para luego subir en 2021 a 315.
Desde esa cartera porteña prefirieron destacar que los robos proyectados para todo el año, en base a lo reportado hasta ahora, “son un 3% menos”. Sobre los motivos, en el Ministerio que conduce Marcelo D’Alessandro, afirmaron que “la Ciudad está al 75% videovigilada y con anillo digital es muy difícil robar un auto o una moto y que no quede registrado”. Recordaron que territorio porteño “se robaban casi 500 vehículos por mes” cuando asumió la actual gestión, y hoy se producen “menos de 50 (robos) mensuales”.
Larreta, este martes, al entregar motos a la Policía de la Ciudad (Foto: WALTER CARRERA Y MARCOS BRINDICCI / GCBA)
En medio de la disputa política y el impacto social por lo ocurrido con Blaquier, ayer, Horacio Rodríguez Larreta también se refirió a este tema, consciente que el tema de la inseguridad es prioritario para el electorado. Eligió comparar los datos respecto del 2016, el primer año de su gestión como jefe de Gobierno. Según manifestó, desde entonces, “el robo con motos disminuyó en un 51%” en la Ciudad. “Las estadísticas demuestran que a partir de la acción coordinada e integrada de toda esta infraestructura de vigilancia y control hoy es casi imposible que un motochorro que robó en el Microcentro llegue a cruzar a la Provincia. Por eso el delito en moto viene disminuyendo año a año. Lo que hacen generalmente es marcar a sus potenciales víctimas en la Ciudad y seguirlas en su recorrido hacia la Provincia”, sostuvo el mandatario del PRO en un acto de entrega de 30 nuevas motos a la Dirección de Operaciones Motorizadas de la Policía de la Ciudad.
El rol de la redes
Grimalt también puso el foco en las redes sociales, no sólo por ser la plataforma donde los delincuentes se exhiben con las motos de alta gama robadas como “trofeos”, sino por la proliferación de grupos de usuarios en los que se ofrecen motocicletas producto del delito.
A las motos robadas que se publicitan en Facebook se las identifica como “Talle M”, por “melliza”, sin papeles
“Si ponés en Facebook ‘moto cruda’, o ‘Talle M” por ‘melliza’ en referencia a una moto robada, aparecen un montón de grupos, con hasta 20.000 miembros. Hay cerrados pero algunos abiertos. Con $50.000 podés comprar una moto robada. Hay incluso canje de drogas o armas por motos. Lo increíble es que cuando escribís una palabra que el robot de Facebook identifica como violenta, te bloquea por 72 horas. Pero cuando denunciás esos grupos en Facebook, te responden que no infringe ninguna de las leyes comunitarias de la plataforma. Las redes sociales terminan siendo cómplices de estos delitos. Algún departamento de Ciberdelincuencia de la Policía debería actuar”, alertó.
Uno de los tantos avisos en Facebook donde se venden motos robadas
Ante la consulta, un portavoz de la empresa dueña de Facebook, Meta, respondió: “No permitimos la oferta, compra, venta o comercialización de productos robados en nuestras plataformas. Desarrollamos modelos de Inteligencia Artificial que contribuyen con la detección de contenido infractor, y colaboramos con las autoridades. Además, contamos con herramientas de denuncia para que las personas pueden reportar contenido, grupos o cuentas que puedan estar infringiendo nuestras políticas”.
Desde el Ministerio de Seguridad de la Provincia aseveraron, en cambio, que “las propias redes sociales de venta, que eran un vehículo para esta gente, ahora son un vehículo de denuncia”.
Sin embargo, las detecciones automatizadas de determinados lenguajes en Facebook no siempre funcionan, y las denuncias a través de la propia plataforma, a través de una opción brindada por la plataforma, no siempre concluye en un bloqueo del usuario o grupo reportado como vinculado a un posible delito.
¿Cómo se procesó la información?
La Unidad de Datos de Infobae accedió a las estadísticas de inscripciones de motovehículos, que publica la Dirección Nacional de Registros Nacionales de la Propiedad Automotor. También se consultó el reporte oficial 2021 de siniestros por tipo de vehículo, incluidos los robos, cuya fuente es la Superintendencia de Seguros de la Nación, en base a datos del IRIS (Sistema de Control de Fraude) y el Sistema PrismaNET (Plan Estadístico Automotores). Si desea visualizar y/o descargar la hoja de cálculo, siga este enlace.