Todo el mundo esperaba el comienzo del enero hábil para poder hacerse de los dólares. Los ahorristas minoristas que deseaban cubrirse en dólares podrían volver a utilizar su cupo mensual máximo de USD 200. Pero el problema es que cada vez menos gente puede acceder a esta posibilidad. Y es que de parte del oficialismo se trata de una maniobra que busca, en los hechos, prohibir a la población evitar que sus ingresos sean resguardados en una moneda mejor.
Por un lado, el gobierno está desesperado por la falta de dólares, tanto para hacer frente a los compromisos de deuda, como para entregarle a las empresas los que necesitan para comprar insumos en el resto del mundo para producir. Por el otro, cree que llegando a un acuerdo con el FMI puede solucionar sus problemas de falta de divisas. En primer lugar, ningún acuerdo con el FMI le va a solucionar el problema de la falta de dólares.
Es bastante dudoso que el Fondo vaya a llegar a un acuerdo light con el Gobierno y, en particular le otorgue capitales frescos para hacer frente a los vencimientos de deuda del año que viene. Pero el punto principal es otro. Es la falta de dólares que tiene el BCRA y que lo llevó a, mediante una circular, violar la Constitución Nacional en su artículo 14 que establece que todos los habitantes gozan de los siguientes derechos.
Dice textualmente: “de trabajar y ejercer toda industria lícita; de navegar y comerciar; de peticionar a las autoridades; de entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino; de publicar sus ideas por la prensa sin censura previa; de usar y disponer de su propiedad; de asociarse con fines útiles; de profesar libremente su culto; de enseñar y aprender”. Para que ningún distraído argumente que ese artículo dice: “conforme a las leyes que reglamenten su ejercicio” conviene recordar el artículo 28.
El mismo establece: “Los principios, garantías y derechos reconocidos en los anteriores artículos, no podrán ser alterados por las leyes que reglamenten su ejercicio”. En otras palabras, cuando se reglamenten los derechos, no pueden anularse por ley. Sería un contrasentido que la Constitución Nacional reconozca los derechos mencionados y luego acepte que sean violados por una simple circular del BCRA, como en este caso.
La decisión del BCRA de prohibir la venta de dólares, al menos, en los hechos, viola el derecho a trabajar, a ejercer toda industria lícita, de comerciar y de disponer de su propiedad. ¿Qué importancia tienen los párrafos anteriores con el tema económico? Que, si el gobierno viola la Constitución mediante una simple circular del BCRA, no existen reglas de juego estables. Nada es previsible en economía y, por lo tanto, no hay inversiones.