El pasado 14 de agosto, cerca de la medianoche, en circunstancias en que la víctima se encontraba en el local bailable ubicado en la localidad de San Andrés, un hombre a través de amenazas y empuñando un arma de fuego, le sustrajo su teléfono celular marca y luego se retiró del lugar.
En consecuencia, se designó un equipo de trabajo para abocarse a las pesquisas mediante una extensa investigación que motivó una serie de medidas judiciales.
En este sentido, este sábado en horas de la mañana, efectivos policiales de la Unidad de Investigaciones Criminales y Delitos Complejos Este concretaron varios allanamientos con el objetivo de recuperar el elemento sustraído a la víctima. Tales acciones se realizaron en un local comercial ubicado en Villa 9 de julio, y en un domicilio de calle Monteagudo, ambos de esta capital.
Durante el allanamiento, los investigadores mediante pericias tecnológicas articuladas con el Enacom establecieron que varios de los celulares encontrados allí, tenían pedido de secuestro por hurtos o robos. El hallazgo fue comunicado a la Unidad Fiscal Interviniente, y desde esa oficina dispusieron el secuestro de los cinco celulares implicados.
Las medidas fueron supervisadas en forma directa por el director y subdirector de la Dirección General de Investigaciones, el comisario mayor Jorge Dib, y el comisario inspector Miguel Carabajal.