La Corte Suprema de Justicia de Tucumán ordenó este martes que se investigue el rol del exgobernador y actual senador nacional José Alperovich en el femicidio de Paulina Lebbos. Además se confirmó la condena a cinco hombres por encubrir el crimen de la estudiante, ocurrido 15 años atrás.
El Máximo Tribunal tucumano también dispuso que se investigue al actual Subsecretario de Seguridad provincial, José Ardiles. Es por haber aceptado el ascenso del excomisario Enrique García, cuando este ya se encontraba imputado por presuntas irregularidades en la investigación del caso.
Por otro lado, se indicó que se investigue como eventuales autores del crimen al hijo de un exsecretario de Alperovich, a la pareja de la víctima y a un hermano de Roberto Luis Gómez, absuelto en 2019 en el segundo juicio por el caso.
Entre los cinco condenados este martes, se encuentran cuatro exfuncionarios del gobierno de Alperovich, que en febrero de 2019 recibieron penas de entre tres y seis años de prisión.
De esa manera, la resolución de los jueces supremos Claudia Sbdar, Stella Maris Arce y Wendy Kassar dejó firme las condenas del exsecretario de Seguridad Eduardo Di Lella; el exjefe de Policía Hugo Sánchez; el exsubjefe de Policía Nicolás Barrera; el exsubjefe de la Regional Norte Rubén Brito; y el expolicía Waldino Rodríguez.
La decisión de la Corte tucumana dejó firmes las penas de seis años de prisión que ya habían sido impuestas a a Di Lella y Sánchez; de cinco años y medio a Barrera; de cinco años a Brito; y de tres años de prisión condicional a Rodríguez.
El caso Lebbos
Paulina Lebbos, que estudiaba Ciencias de la Comunicación, salió a bailar con amigas el 25 de febrero de 2006 para celebrar que había aprobado un examen. Ese día la joven tomó un taxi, que todavía no se logró identificar, con una de sus compañeras, que se bajó antes.
Lebbos, que entonces tenía 23 años, siguió para ir a la casa de su novio. Pero al día siguiente, cuando su familia advirtió que no volvía, empezó a buscarla. Finalmente, el 11 de marzo de ese año fue hallado su cuerpo al costado de la ruta provincial 341, a unos 30 kilómetros de la capital tucumana.
Pasaron casi 15 años y más de 1000 marchas en reclamo de justicia por el crimen de Paulina Lebbos en Tucumán. Más allá de la ratificación de las condenas a los cinco encubridores, todavía no se acusó a nadie del delito de privación ilegítima de la libertad seguida de muerte y el próximo viernes, tal como alguna vez advirtió el padre de la víctima, la causa podría quedar impune por prescripción.
“Decían que estaban investigando pero en realidad estaban destruyendo las pruebas”, dijo a TN.com.ar Alberto Lebbos, el papá de Paulina. “Hay varias manos asesinas de Paulina, de la Justicia y de la verdad”, remarcó Lebbos a pocos metros del lugar donde hace ya más de una década encontraron el cuerpo de su hija.
Así, el hombre incansable que se enfrentó a todo y a todos para que los asesinos paguen por lo que hicieron, se refirió a la “cadena de responsabilidades institucionales que hubo para llegar a la prescripción”.
