BUENOS AIRES.- El ministro de Interior, Rogelio Frigerio, aseguró que los problemas de Argentina son “estructurales” y que “no se resuelven en una gestión de gobierno”. También manifestó que se están “sentando las bases” del “cambio estructural” que necesita el país para dejar atrás la crisis.
“Justamente, nuestro principal error fue creer que esos problemas se resuelven en una gestión de gobierno”, reconoció ayer Frigerio en diálogo con radio Mitre.
El funcionario insistió en que las adversidades estructurales de la economía resultan “tremendamente difíciles” de solucionar y dijo que “necesitan tiempo” para hacerlo, aunque admitió que “es difícil pedirlo a una sociedad tan sufrida como la argentina”.
Frigerio recordó que este mes se cumple un año del inicio de la crisis y la recesión, y enumeró como causales de la contracción al cierre del crédito a la región y a “la peor sequía” de los últimos cincuenta años. El titular de la cartera de Interior dijo que, con el fin de mejorar esa situación, se elaboró “un presupuesto equilibrado” y que siguen trabajando “para solucionar los problemas que más le quitan el sueño a los compatriotas”.
Frigerio asumió que la política monetaria, por lo menos, “tarda seis meses en dar resultados” y aceptó que “la volatilidad cambiaria es algo que preocupa a los argentinos, como también la inflación”; pero que no es algo “de ahora, sino de siempre”.
El ministro aseveró que, a pesar de la crisis, el Gobierno sigue invirtiendo en obras públicas “que le mejoran la vida a la gente”, e insistió en que “el gasto social es el más alto de la historia”. Aún así, reflexionó que “millones de argentinos pasan una situación angustiante” debido a la crisis en curso. (Télam)
