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Grave acusación de una madre contra un reconocido colegio de Yerba Buena

Raquel Gatti es una mamá tucumana que este fin de semana acusó al Colegio Fasta Ángel María Boisdron de poner en riesgo a sus alumnos, al organizar un evento masivo en uno de los predios que la institución tiene en Yerba Buena, sin respetar los protocolos sanitarios establecidos y reforzados por la segunda ola de coronavirus que ya afecta a Tucumán.

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A través de las redes sociales, una mamá que envía a sus hijos a la institución, los acusó de poner en riesgo la presencialidad al organizar un evento para los alumnos sin tener en cuenta las burbujas sanitarias de cada grado y curso.
Descacharreo

A través de un vivo realizado en su cuenta de Instagram, la mujer apuntó contra las autoridades del establecimiento y contra los padres que criticaron la decisión de Nación, de suspender la presencialidad en Buenos Aires con la posibilidad de extenderse al resto de las provincias.  

“Como mamá, como emprendedora, como argentina, me siento en la obligación de hacer este vivo para denunciar con un tema que no quiero dejar pasar. Se está realizando un evento que pone en juego la presencialidad en las escuelas”, comenzó diciendo Gatti, haciendo referencia a una jornada deportiva, recreativa y con misa incluida, que se llevó a cabo ayer sábado, organizada por una agrupación religiosa juvenil de Fasta (Fraternidad Apostólica Sacerdotal Tomás de Aquino), llamada Ruca.

“En la mayoría de las escuelas y colegios se cumplen los protocolos. Pero esos mismos grupos que hacen comentarios en redes por la presencialidad, en este mismo momento están desarrollando una actividad que nada tiene que ver con la educación, en uno de los predios del colegio Boisdron, a los que mis hijos asisten”, agregó la mujer que aseguró haber llevado sus quejas a las autoridades del colegio, que le respondieron que el evento se realizaría de igual manera.

Fumigación y Limpieza

“Organizaron una jornada que tiene fines formativos y recreativos, pero incluso convocaron a una especie de baile y una misa, desde las 16. Fíjense la cantidad de chicos que van a estar mezclados de todas las burbujas y edades sin ningún tipo de protocolos. Durante lunes a viernes hacemos burbujas, la educación dual y el fin de semana el propio colegio convoca a un evento mezclando y tirando todos esos protocolos no les digo dónde, porque tengo que ser educada. Me canse de los doble cara que reclaman presencialidad y a la salida se juntan en las casas”, lanzó.

Movilidad Urbana

Luego de la acusación, Gatti afirmó que por al menos dos semanas no enviaría a sus hijos a clases, a causa del evento de la polémica. “Yo no voy a enviar a mis hijos a un colegio que rompió los protocolos establecidos por el COE de Tucumán. No lo voy a hacer. Un colegio privado de primer nivel, con una instrucción de obediencia, sale con un evento así, no me puedo quedar callada”, señaló. Y agregó: “No me aseguran un entorno seguro. Lo tengo que decir, mis chicos no van a ir al colegio. Por lo menos los voy a poner en cuarentena durante 15 días después de este evento”.

Por último hizo una reflexión, ya que durante enero su familia atravesó el covid sin complicaciones, sin embargo pidió pensar en aquellos que la pasaron mal y hasta perdieron sus seres queridos. “No podemos no pensar en el otro. Si esta pandemia no nos enseñó ser más humano no sé qué pasó. El colegio Boisdron no está respetando los protocolos”, acusó.

Tras la publicación de su denuncia, Raquel comentó a eltucumano.com que decidió realizarla ya que solo pretende visibilizar su preocupación “sobre la presencialidad en riesgo por gente que no respeta el protocolo vigente y las restricciones del COE”. “Está clarísimo que un evento como el que realizaron no estaba permitido y lo hicieron igual. A pesar de que pedí que lo suspendan. Tenemos que cuidarnos más que nunca, se lo debemos al otro. Hoy más que nunca el otro soy yo”, finalizó.

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