Un nuevo reclamo piquetero generó una tarde de caos en el tránsito del microcentro de la Ciudad de Buenos Aires. Ocurre que la Unidad Piquetera realiza cortes de calles en el marco del reclamo por una “Navidad sin hambre”: decidieron montar carpas frente al Ministerio de Desarrollo social para pasar la noche a menos que sean recibidos por la ministra Victoria Tolosa Paz. Como eso no sucedió, según precisaron desde ese sector a Infobae, decidieron impulsar un acampe por tiempo indeterminado.
El reclamo inició esta tarde a las 13, cuando las columnas concentraron a los pies del Obelisco. A propósito de lo que se demanda, señalaron: “No aceptamos las bajas masivas que afectan a decenas de miles de compañeros que sobreviven con el programa Potenciar Trabajo, la falta de alimentos en los comedores populares y la burla de un bono miserable que pone de manifiesto que el ajuste del FMI golpea brutalmente a los que menos tienen”. El beneficio al que apuntan es que fue anunciado de manera oficial una semana atrás: de 13.500 pesos, en dos tramos.
Pasadas las 14.30, los piqueteros se movilizaron hacia el Ministerio de Desarrollo Social. Allí decidieron montar carpas para pasar la noche sobre la Avenida 9 de Julio a menos que sean recibidos por la titular de la cartera, Victoria Tolosa Paz. Como eso no sucedió, cerca de las 19 definieron desplegar carpas para pasar la noche en el lugar. “No hay respuestas a los reclamos”, le aseguró a este medio Eduardo Belliboni, referente del Polo Obrero.
“Los cortes en Av. 9 de Julio afectan al Metrobus”, indicó el Gobierno porteño a través de la cuenta oficial en Twitter de la Secretaría de Turismo. También, precisaron que la protesta genera cortes en la avenida 9 de Julio, entre San Juan y Córdoba.
El reclamo también es planteado —según indicaron desde el sector— por una “Navidad sin hambre”, máquinas y herramientas para las cooperativas. También, como se comentó, protestan por las bajas en el programa Potenciar Trabajo y por el bono otorgado por la Casa Rosada.
“¡Argentina Campeón! Basta de Hambre y Desocupación”, es el lema con que la Unidad Piquetera difundiaron el acampe y partido de fútbol en que el equipo local se enfrentó al “hambre y al ajuste” del gobierno de Alberto Fernández, una parodia que ya tiene resultado, la selección blanca y celeste pierde por goleada contra —según Eduardo Belliboni, del Polo Obrero— “el ajuste implementado a pedido del FMI”. El partido de fútbol “simbólico” inició pasadas las 17 y duró poco menos de una hora.
Desde la dirección de la Unidad Piquetera, que volverá a las calles con fuerza, “los motivos sobran para luchar a días de las fiestas, y de ganar un campeonato del mundo” y reforzaron: “La Unidad Piquetera va a acampar este jueves contra las bajas, para que se garanticen los alimentos para los comedores populares, por herramientas de trabajo para los proyectos y por trabajo genuino”.
Desde el Gobierno nacional intentaron evitar nuevas marchas y acampes en las calles porteñas y en el resto del país, pero las gestiones de la funcionaria que reemplazó a Juan Zabaleta fracasaron. El centro neurálgico de la Ciudad de Buenos Aires colapsará una vez más.
“La Unidad Piquetera acampa por tiempo indefinido en CABA frente al Ministerio de Desarrollo Social y realiza acampes y cortes de ruta en 63 ciudades de 23 Provincias”, había anunciado ayer el Polo Obrero.
La policía de la Ciudad será criticada por no desalojar a los miles de piqueteros que reclaman por lo que, según entienden, son demandas justas sin solución desde hace meses. Las Fuerzas Federales tampoco intervendrán. Esto ocurre desde que Alberto Fernández llegó a la Casa Rosada hace tres años.
El jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, ya fijo posición: es un reclamo al Poder Ejecutivo Nacional, pero afecta al normal desarrollo de las actividades en CABA en los alrededores del ministerio.
Aníbal Fernández, ministro de Seguridad de la Nación, también expreso su opinión con anterioridad a esta medida: la seguridad en territorio porteño es responsabilidad de su par, Marcelo D’ Alessandro. A su turno, el funcionario de Rodríguez Larreta propuso como solución quitarle los planes sociales a los que corten calles y avenidas. Una hipotética medida cuestionada desde Balcarce 50.
