El paro localizado de colectivos podría extenderse hasta el próximo sábado. Así se desprende de las distintas declaraciones realizadas por los protagonistas del conflicto: César González (secretario general del gremio UTA), el gobernador Osvaldo Jaldo y Martín Viola, secretario de Gobierno del Municipio capitalino. Cada uno se refirió de distinto modo al conflicto del transporte público y dejaron en claro su postura y cuál sería su tarea para destrabar la medida de fuerza dictada este martes por tiempo indeterminado.
“Creo que hay un conflicto puntual, que trasciende lo municipal, que es una cuestión nacional y provincial, por eso creo que tenemos que aguardar que la intendenta Chahla regrese para que nos reunamos con la Provincia”, señaló Viola, quien también adelantó que la semana que viene se reunirán con legisladores para buscar otra salida al servicio de ómnibus.
En cuanto a la postura del gremio de choferes, César González adelantó que la única forma de levantar el paro es la restitución en sus puestos de trabajo a cerca de 200 empleados de empresas explotadores de líneas urbanas de colectivos, despedidos esta semana. “Nosotros vamos a levantar la medida de fuerza cuando los 200 compañeros que han sido despedidos vuelvan a sus lugares de trabajo, sino no nos movemos”, advirtió y opinó que el problema es “netamente municipal”.
En este sentido se expresó también el gobernador Osvaldo Jaldo. En conferencia de prensa, entre otras cosas, reclamó no haber sido contactado por la intendenta o alguno de sus funcionarios, se despegó del conflicto y requirió a la Municipalidad capitalina administrar los medios necesarios para destrabar la medida de fuerza. “De la 1 a la 19 es una facultad exclusiva de San Miguel de Tucumán. La Provincia, para colaborar, debe ser convocada. Como voy a ir como gobernador a interceder en un conflicto donde las líneas son dependientes de la Capital, a tal punto que el precio del boleto lo fija el Concejo Deliberante y nosotros lo tomamos con otro instrumento, que es una resolución de transporte”, manifestó el primer mandatario provincial.
Por otra parte, descartó que desde el gobierno de la Provincia se solicite la conciliación obligatoria. “La conciliación debe ser pedida por una de las partes. La Provincia no puede porque no es parte del conflicto”, advirtió y le trasladó la responsabilidad al Municipio. Por todo lo anteriormente expuesto, el conflicto del transporte público en la ciudad capital se encuentra supeditado a la conciliación entre las partes, en este caso los jefes municipal y provincial. Algo que no ocurriría hasta el regreso de la intendenta Rossana Chahla a la provincia, que se encuentra de viaje oficial en Alemania, está programado para el viernes o sábado.