Através de un decreto, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta decidió que no volverá a utilizar la Boleta Única Electrónica en las elecciones generales porteñas del 22 de octubre y que, en cambio, se utilizará la boleta de papel tradicional, pero separada de la papeleta que ese mismo día se empleará para elegir presidente, legisladores nacionales y diputados del Parlasur.
“No obstante el carácter simultáneo de las elecciones resulta conveniente establecer, a fin de reafirmar la autonomía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que las boletas de sufragio de las autoridades locales estén separadas de aquellas de las autoridades nacionales, conforme la facultad que surge del artículo 60 del anexo I, de la Ley N° 6.031, Código Electoral de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, señala el decreto que se conoció este martes.
La intención de la Ciudad es que, además de votar con boletas separadas, también se utilice un biombo y una urna separada de la nacional en la elección porteña. De todos modos, en el decreto aclaró que esa decisión está sujeta a una decisión de la jueza federal con competencia electoral María Servini. “A partir de la adhesión al régimen de simultaneidad, el sistema de votación será determinado por la jueza federal con competencia electoral, aunque se mantendrá el esquema de boletas separadas para las autoridades locales”, afirmaron.