La tristeza se notaba en sus rostros. Algunos niños lloraban, sus padres al lado cargados de impotencia con la entrada en la mano sin poder ingresar al estadio de River. Las entradas truchas fueron una constante ayer en el ingreso del público para ver a los campeones del mundo.
La bronca de muchos estafados con entradas truchas pudo verse en los alrededores del estadio. Unas 400 personas llegaron desde Mendoza, Tandil y Río Negro y se dieron con que, al tratar de ingresar al Monumental, habían sido estafados.
Desalojados de la zona de ingreso
Al mostrar sus entradas en los controles descubrieron que eran truchas. Algunos pagaron hasta $ 200.000. Todos fueron apartados y desalojados de la zona de ingreso. Además, la policía detuvo a dos personas en las inmediaciones del estadio que intentaban vender entradas falsas para el partido que disputará la Argentina contra Panamá esta noche disputará.
Bronca y frsutración por haber sido estafado. FOTO tomada de la web del diario La Nación.
La policía detuvo a dos mayores con 52 entradas truchas. Esto ocurrió sobre la Avenida del Libertador 6445 cuando Personal de la División Contravenciones y Faltas en Eventos Masivos localizó un transporte de larga distancia con balizas y dos hombres con un fajo de entradas.
Los oficiales les solicitaron que se identificaran y afirmaron ser socios de una empresa de turismo y transporte de la provincia de La Pampa. Uno de ellos declaró que había adquirido 52 entradas a un tercero.
Los hinchas habían llegado directo al estadio
Se labraron actuaciones por infracción al Artículo 108 -Revender entradas- a las personas que efectuaron las reventas. Un grupo de 60 personas que llegaron desde Catriel, Río Negro, fueron estafadas y no pudieron ingresar. Los fanáticos habían salido ayer a las 18.30 desde su provincia y llegaron directo para el partido.
Una situación similar vivieron fanáticos que llegaron en micro desde Mendoza y también de Tandil, que suman unos 400 estafados. La Policía resaltó que haber comprado una entrada trucha no es delito, pero sí venderlas y que, en todos los casos al poseedor de la entrada se lo invitó a realizar la denuncia correspondiente.
