Tras la aprobación en general de la Ley Ómnibus, se viven momentos de tensión frente al Congreso, donde organizaciones piqueteras de izquierda se manifiestan en rechazo al proyecto de oficialista que se votó en la Cámara de Diputados. El martes que viene se votará la ley en particular, artículo por artículo.
Los manifestantes que circulaban por la vereda intentaron bajar a la calle y la policía decidió intervenir, tal como ordenó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Los piqueteros se amontonaron sobre el cordón de seguridad y los efectivos les tiraron gas pimienta para frenarlos.
La marcha comenzó cerca de las 17. En un comunicado, la CTAhabía convocado a movilizarse desde las intersecciones de las calles Hipólito Yrigoyen y Sáenz Peña para protestar contra la Ley Ómnibus, el DNU y las facultades delegadas.
Del mismo modo, se realizó un “bocinazo contra la Ley Ómnibus”. Ante esta situación, el Congreso se encuentra nuevamente vallado y se lleva a cabo un gran despliegue de las fuerzas policiales para la jornada.
La policía tiene la orden de mantener las calles liberadas y que la manifestación se mantenga sobre la vereda, y así cumplir con el protocolo antipiquetes.
Antes de las 18, los efectivos policiales generaron un perímetro con oficiales en los alrededores de la Plaza del Congreso. Armaron un cordón policial para impedir que los asistentes a la marcha bajen al asfalto.
La expectativa está puesta en lo que pueda ocurrir en la zona del Congreso, después de que la Cámara de Diputados aprobara en general el proyecto. Pasadas las 18.30, las columnas de piqueteros todavía se mantienen frente al órgano legislativo, por ahora sin corte de calle.
El Gobierno mantiene el protocolo antipiquetes
El jueves se vivieron momentos de máxima tensión con enfrentamientos entre manifestantes y la policía, incluso con participación de algunos diputados opositores que se fueron del recinto en plena sesión.
En este sentido, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, adelantó que el operativo de las fuerzas se mantendrá durante toda la tarde de este viernes. “Estamos viviendo el intento permanente de pasar el límite de lo permitido para seguir avanzando en la toma de la calle diariamente. Eso no lo vamos a permitir de ninguna manera”, aseguró.
En conferencia de prensa, la ministra también dijo que la Argentina “necesita un cambio cultural”. “Vamos a poner orden, lo necesario para que el Congreso sesione y las calles no estén tomadas, que haya convivencia de derechos”, agregó.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, también habló al respecto y destacó “la titánica tarea” de las fuerzas de seguridad en el operativo de Plaza Congreso, mientras se debatía en el recinto la Ley Ómnibus.
Además, informó que hubo ocho detenidos por los incidentes, y afirmó que quien “viole la ley será castigado”, durante su habitual conferencia de prensa que brinda en la Casa Rosada.
“No estamos dispuestos a que un grupo de violentos intente evitar un debate legislativo. Este Gobierno no fue elegido para mantener contentos a todos, sino para los argentinos que quieren un país mejor, que afortunadamente son la mayoría”, aseguró el vocero.
Luego, Adorni, aseguró que el Gobierno “está dispuesto a terminar con la intermediación de los planes sociales” y las asistencias que reciben los comedores. “Se están auditando todos”, dijo y agregó: “Toda la situación social está siendo monitoreada todo el tiempo. Esto siempre va a estar en el marco de la legalidad y los términos que el Ministerio de Capital Humano disponga para cada caso”.