Estados Unidos confirmó este martes el lanzamiento por parte de Irán de “más de una docena” de misiles contra sus bases Ain al Asad y Erbil en Irak. La Guardia Revolucionaria Islámica (RPC), que se adjudicó el ataque, amenazó a la Casa Blanca con una “respuesta más dolorosa y aplastante” en caso de represalias.
A través de un comunicado difundido por la agencia de noticias IRNA, la rama de las Fuerzas Armadas iraníes reconoció haber enviado el ataque contra las sedes norteamericanas en respuesta al asesinato de Qasem Soleimani.
En tanto, dirigió una amenaza a la Casa Blanca ante una potencial represalia en respuesta a la ofensiva. “Advertimos al Gran Satanás, el régimen estadounidense, que cualquier repercusión u otra movilidad o agresión dará como resultado respuestas más dolorosas y aplastantes“, aseguraron.
Además, hicieron extensiva la advertencia a Israel, y agregaron: “De ninguna manera consideramos que el régimen sionista en estos crímenes esté separado del régimen criminal estadounidense”.
A través de un comunicado, el asistente de Defensa para Asuntos Públicos de EEUU, Jonathan Hoffman, confirmó el lanzamiento de más de una docena de misiles balísticos contra militares de Estados Unidos y fuerzas de coalición en Irak.
Si bien no hubo informes inmediatos de bajas en las sedes, identificadas como Al Asad y Erbil, el departamento estadounidense de Defensa anunció que está conduciendo una “evaluación preliminar de daños” y evaluando su “respuesta” al ataque.