Robos, arrebatos, asaltos, entraderas. Todo tipo de accionar de los delincuentes se deja ver en la calle Italia al 3000.
“Vivimos con mucho miedo, no somos dueños de salir a la calle después de las siete de la tarde. Esto es tierra de nadie“, afirmó una vecina. La mayoría tiene una historia para contar relacionada con la inseguridad.
Este jueves, la víctima fue el propietario de una carnicería. Antes fue el dueño de una pollería y así. “A un negocio de la esquina le hicieron cuatro tiros. El dueño se salvó porque se cubrió con una mesa“, comentaron.
“Tenemos que pagar un rondín porque acá no hay policías. Tenemos que comprar cámaras de seguridad porque el Estado no está“, agregaron.