Cuatro meses después de recibir al presidente Javier Milei en su residencia de San Salvador, Nayib Bukele devolvió el gesto y llegó minutos después de las 15 a la Casa Rosada, donde está reunido con el presidente argentino.
Su encuentro con Milei, que lo esperaba desde las 14, en visita de Estado, confirmó la sintonía política e ideológica cimentada durante aquel primer encuentro, cuando Bukele asumió su segundo mandato. Sintonía reforzada, dos semanas después del encuentro de presidentes, con la visita a El Salvador de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, admiradora confesa del plan de combate a la delincuencia que Bukele puso en marcha durante su primer período de gobierno.
Llegado el jueves por la noche al país, Bukele tuvo como primera actividad oficial el tradicional homenaje a José de San Martín, al colocar la ofrenda floral en el monumento al prócer, en la plaza que lleva su nombre, en Retiro. Lo acompañó la canciller, Diana Mondino. “Somos muy amigos, esperemos profundizar en una agenda extensa, en energía nuclear, comercio, seguridad. Hay muchos temas”, dijo Bukele a los periodistas al culminar la ceremonia, y antes de trasladarse a la Casa Rosada para el encuentro con el Presidente.
Luego de ingresar por la explanada de la calle Rivadavia, Bukele fue recibido por el presidente argentino en el Salón de los Bustos. Posaron brevemente para los fotógrafos en el salón Blanco, antes de ingresar al despacho presidencial para un encuentro a solas. Contrastó la sonrisa permanente del salvadoreño con la seriedad de Milei durante la breve sesión fotográfica.
Bukele se convirtió así en el tercer mandatario extranjero en ser recibido por Milei en lo que va de su mandato, después de Santiago Peña (Paraguay) y Luis Lacalle Pou (Uruguay), aunque en los casos anteriores se trató de reuniones oficiales.
Desde temprano comenzaron los preparativos en la Casa Rosada para la llegada del mandatario salvadoreño. Los ministros fueron llegando de a uno, encabezados por el jefe de gabinete, Guillermo Francos, y la mayoría participó de un encuentro previo a la foto. Lo mismo hizo la diputada nacional Lilia Lemoine, habitual maquilladora del Presidente en eventos significativos. Cuando Milei y Bukele ingresaron a su charla privada, los ministros y la delegación salvadoreña se saludaron en el Salón Sur.
Los presidentes volverán a mostrar su sintonía por la noche, cuando ambos compartan una cena en la quinta presidencial de Olivos.
Mañana, el presidente salvadoreño cerrará su periplo por Buenos Aires con sus visitas al Senado y la Cámara de Diputados.