El presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden, volvió a criticar los disturbios que tuvieron lugar el miércoles en el Capitolio y aseguró que los partidarios de Donald Trump que ingresaron a la sede del legislativo “no eran manifestantes”, sino “terroristas domésticos”.
En una declaración desde sus oficinas de transición en Wilmington, Delaware, Biden volvió a condenar los hechos, describiéndolos como “uno de los días más oscuros en la historia de nuestra nación” y un “asalto sin precedentes sobre nuestra democracia”.
“Fue un asalto literal contra la ciudadela de la libertad, el mismo Capitolio de los Estados Unidos. Fue un asalto sobre el Estado de derecho”, agregó. Y responsabilizó directamente al mandatario saliente por incitar los hechos. “No es cierto que no podríamos haber previsto esto. Durante los últimos cuatro años hemos tenido un presidente que ha dejado en claro su desdén por la Constitución”, dijo.Foto de los disturbios del miércoles fuera del Capitolio de EEUU
Y agregó: “Desató un ataque sin precedentes sobre las instituciones democráticas y lo de ayer fue el punto cúlmine. Ha llamado a la prensa ‘el enemigo del pueblo’. Ese es un lenguaje usado por los autócratas y dictadores”.
En otro pasaje de su locución, el mandatario electo acusó a las fuerzas de seguridad de actuar con mayor clemencia el miércoles que al lidiar con los manifestantes contra la desigualdad racial del movimiento Black Lives Matter: “Nadie me puede decir que si hubiera sido un grupo de manifestantes de Black Lives Matter el que estaba protestando ayer, hubieran sido tratados de manera muy, muy diferente a la banda de matones que asaltó el Capitolio. Sabemos que es verdad y es inaceptable”, expresó.