El índice líder de la Bolsa de Comercio porteña renovó su récord nominal este viernes, gracias al persistente arribo de fondos por parte de inversores institucionales a la región, en línea con un buen dato de empleo en Estados Unidos, mientras que los bonos mostraron tendencia bajista por toma de utilidades.
“El reporte de empleo (estadounidense) dejó una auspiciosa lectura ya que mostró una positiva creación de puestos, pero no tan fuerte tampoco como para ‘obligar’ a la Fed a acelerar los tiempos del tapering (retiro progresivo de los estímulos económicos), ante lo cual Wall Street responde reanudando un mayor apetito por riesgo”, que se traslada a las plazas emergentes, refirió el titular de Estudio Ber, Gustavo Ber.
El índice accionario S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires ganó un 2,9%, a 66.190 puntos, luego de marcar en la sesión un máximo histórico intradiario de 66.228 unidades. El referencial líder acumula una mejora del 17,7% en las últimas ocho jornadas de negocios.
Mientras que los principales índices de Wall Street operaron con ganancias en un rango de 0,5% y 1,5%, con los papeles tecnológicos al frente, los ADR y acciones de compañías argentinas que se operan en dólares en Nueva York exhibieron ganancias de hasta 6,9%, con los papeles de Central Puerto y Banco Supervielle, escoltados por Grupo Financiero Galicia, con un 6 por ciento.El panel Merval, medido en dólares, quedó muy cerca de los 400 puntos por primera vez desde el 10 de agosto pasado
Ber sostuvo que “la reacción de risk-on que despertó el reporte de empleo en el norte de inmediato volvió a favorecer a los activos domésticos, los cuales vienen aprovechando el ‘momentum’ que impulsan las apuestas tácticas desde el exterior ante flujos hacia emergentes y el ‘efecto MSCI’”.
La semana que viene, el mayor proveedor de índices financieros del mundo, MSCI, definirá si Argentina continúa en su categoría de “Mercados Emergentes”, o vuelve a ser de “Frontera”.
Los bonos Globales –en dólares con ley extranjera– cedieron un 0,5% en promedio, mientras que el riesgo país de JP Morgan, que mide la brecha de tasas de los bonos del Tesoro de los EEUU con sus pares emergentes, crecía 11 unidades para la Argentina, a 1.510 puntos básicos a las 17 horas, en una rueda en la que los rendimientos de los Treasuries a 10 años retrocedió a 1,56 por ciento.
Los bonos soberanos negociados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) perdieron en promedio un 0,4% en pesos, con rotación hacia papeles ligados a la inflación.
Argentina ingresó a un período de gracia por dos meses con el Club de París tras el vencimiento de una deuda por USD 2.400 millones, mientras que mantiene conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar unos USD 45.000 millones en un año de elecciones legislativas en noviembre y de una dura segunda ola de COVID-19.
Se extendió la “pax” cambiaria
El dólar libre cerró ofrecido este viernes a $157 para la venta, con alza de un peso. De todos modos, la divisa informal no consigue repuntar en un 2021 en el que mantiene una caída de 9 pesos o 5,4 por ciento.
En el mercado mayorista, el dólar ascendió cinco centavos, a $94,86, con un incremento de 0,3% en la semana, y un 12,8% desde que comenzó 2021. La brecha de precios entre el tipo de cambio oficial y el libre alcanza el 65,4%, mientras que se amplía al 75,2% respecto del “contado con liqui” implícito en acciones y bonos que se negocian en simultáneo en la Bolsa local y el exterior.
El monto operado en el segmento de contado (spot) fue de unos USD 263,172 millones , en una rueda con saldo neutro para el Banco Central por su intervención cambiaria.
En cuanto a las cotizaciones bursátiles, éstas cedieron por segundo día después de haber interrumpido el jueves una serie continuada de 14 jornadas operativas en alza.
El “contado con liquidación”, que permite acreditar divisas en el exterior, terminó negociado a $166,20, mientras que el dólar MEP, aquel que es más intervenido por las ventas de bonos que efectúan organismos públicos, cerró pactado a 160,86 pesos.
