Uno de cada diez adolescentes del Gran Tucumán y Tafí Viejo no concurre a ningún establecimiento educativo. Mejoras y preocupación.
Uno de cada diez adolescentes tucumanos de entre 15 y 17 años no concurre a un establecimiento educativo. La cifra de inasistencia es sensiblemente mayor a la que se registra en la franja de niños y niñas que va desde los 5 a los 14 años, donde la presencia en las aulas casi llega al ciento por ciento de la población.
Los datos surgen del último informe de “Condiciones de vida del Gran Tucumán y Tafí Viejo”, que realiza en forma semestral la Dirección de Estadística de la provincia sobre datos del Indec, y corresponden al primer semestre de 2024. El informe revela que, en el universo de jóvenes tucumanos de entre 15 y 17 años, el 90,4% asiste a las escuelas mientras que el porcentaje restante no lo hace. Si se lo compara con la misma medición de un año atrás, la concurrencia muestra mejoras. En 2023, el 12% de los jóvenes de esa edad no concurría a la escuela.
El dato de inasistencias escolares entre adolescentes en Tucumán es más alto que el que registra el resto de los 31 conglomerados urbanos del país que mide el Indec. En ellos, el 93,3 % de esa población registra asistencia a las aulas. En el resto de las provincias del NOA, ese número llega al 92,9% de los jóvenes.
Condición obligatoria
En Argentina, según la ley de Educación Nacional, la obligatoriedad escolar se extiende desde los cuatro años hasta la finalización de la escuela secundaria. De acuerdo con datos del Censo 2022, el país está muy cerca de alcanzar la educación primaria universal entre los niños de 4 y 14 años, pero la asistencia disminuye en la secundaria entre los adolescentes de entre 15 y 17 años. El número de personas que no asiste a clases crece en la franja que va desde 18 a los 24 años. Tucumán no es la excepción tampoco en este punto. Según el informe recientemente publicado, hay 57.813 adultos jóvenes que no concurren a ningún establecimiento. De ellos, el 32 % tiene el secundario incompleto.
El informe estadístico, realizado por la Provincia sobre datos de la Encuesta Permanente de Hogares, vincula la asistencia a clases con lo que se denomina “clima educativo del hogar”. El dato mide el promedio de años de escolaridad que tienen los adultos que viven con los menores o jóvenes. Mientras menos años de formación tienen los padres, más alta es la inasistencia de sus hijos a las aulas.
Desde el Ministerio de Educación de la Provincia, precisaron que implementaron diversas acciones tendientes a lograr la pronta recuperación de los alumnos que abandonaron la educación obligatoria. Según la ministra de Educación, Susana Montaldo, se implementaron programas que tienen por finalidad la reinserción de quienes abandonaron la escuela, tanto aquellos que tienen edad escolar, como aquellos que ya cuentan con edad superior a los 18 años.
“A través de la Dirección de Jóvenes y Adultos se procura que quienes no concluyeron la educación obligatoria puedan hacerlo, mediante un cursado flexible que les permita cumplir obligaciones laborales o familiares, y con el valor agregado de ofrecer formación para el trabajo”, dijo.
Adultos en la escuela
Otro dato que registra el análisis estadístico de la Provincia es el relacionado con las personas incluidas en la franja etaria de los 18 a los 24 años. De un universo de 108.281 habitantes, el 46% concurre a un establecimiento educativo. La mayoría de ese grupo lo hace en el nivel universitario. 42.458 habitantes del Gran Tucumán y Tafí Viejo se encuentra cursando estudios en el nivel superior. Un total de 6.525 ciudadanos concurre a escuelas del nivel secundario.
Entre las personas mayores de edad y hasta 24 años que no continúan sus estudios, poco más de la mitad tiene estudios secundarios completos, 18.487 no terminaron ese nivel educativo y 4.271 tienen el primario completo. El 3,2% de los habitantes del principal conglomerado urbano de Tucumán, en tanto, no completo la educación básica.
En el análisis de la situación educativa de las personas mayores de 25 años, el informe estadístico arroja datos interesantes. El porcentaje de finalización de la educación secundaria es menor en la población con mayor edad. Hasta los 29 años, no completó ese nivel educativo el 16,3% de población, lo que implica poco más de 59 mil personas sin alcanzar ese nivel educativo obligatorio. En el grupo de mayores de 65 años ese mismo dato llega al 10,7%, un total de 22.319 ciudadanos en números concretos. La franja de personas incluidas entre los 30 y los 64 años, en tanto, es la que registra mejores datos en la educación universitaria: el 19,4 % completó sus estudios de grado.