La embajadora de Israel en la Argentina Galit Ronen rechazó de manera contundente que la foto del médico Ramón Carrillo figure en el billete de 5000 pesos. “Cuando decimos ‘Nunca más’ refiriendo al Holocausto, no hace sentido conmemorar alguien que, por lo menos, fue un simpatizante con esta ideología“, sentenció la diplomática a través de Twitter.
La polémica surgió frente a la noticia de que, en medio de la pandemia de coronavirus y ante la necesidad de una mayor emisión monetaria, el Gobierno había barajado la posibilidad de imprimir un billete que homenajeara a médicos y científicos.
En este contexto, trascendió un boceto en el que figuraban en el frente los rostros del primer ministro de Salud de Juan Domingo Perón y el de la primera mujer médica del país, Cecilia Grierson. Además, al dorso aparecía la imagen del edificio del Instituto Malbrán.
El tuit de la embajadora Ronen recibió el apoyo de otro diplomático, el embajador del Reino Unido, Mark Kent, que escribió: “El nazismo fue el mayor mal del siglo XX. Condujo al Holocausto. La muerte de millones de inocentes. No debemos conmemorar a nadie que participó en este terrible episodio“.
Si bien el presidente Alberto Fernández negó que se fuera a emitir, la idea de este billete provocó el repudio del Centro Wiesenthal, que definió a Carrillo como un “simpatizante de Adolf Hitler”.
“Carillo, además de ser un admirador de Hitler, creó el concepto del ‘soldado ideal’ para rechazar a los reclutas que él consideraba como ‘rarezas’ raciales y de género. También proporcionó refugio al fugitivo danés, médico del campo de Buchenwald, Carl Peter Vaernet, permitiéndole continuar con los experimentos con homosexuales para ‘curarlos'”, contaron a través de un comunicado desde la institución dedicada a documentar las víctimas del Holocausto.
A su vez, los Doctores Shimon Samuels y Ariel Gelblung, Directores de Relaciones Internacionales y para América Latina de este centro sentenciaron: “Rechazamos enfáticamente la elección de un personaje así, que mancillará a Argentina con su imagen en su billete de mayor denominación“.
Más allá de que Fernández dijo durante una entrevista no tener prevista la circulación de un billete de ese valor, el diario La Nación mostró evidencia de que hasta el Banco Central llegó a firmar su conformidad con las pruebas que se hicieron del billete y que se la entregó a la Casa de Moneda. Esta publicación exhibió el papel en el que aparecían los rostros de Carrillo y Grierson.
Quién fue Ramón Carrillo
Nacido en Santiago del Estero en 1906, Ramón Carrillo fue un neurocirujano, neurobiólogo y médico sanitarista de Argentina que llegó a ocupar el cargo de primer ministro de Salud de la Nación Argentina, desde 1949 hasta 1954, durante la presidencia de Juan Domingo Perón.
Fue un funcionario aplaudido por su labor en la salud pública, ya que durante su gestión se construyeron 234 hospitales, 60 Institutos de Especialización, 50 Centros Materno-infantiles, entre otros.
Sin embargo, también se lo consideraba un admirador de Adolfo Hitler y partidario de la eugenesia, que promueve el mejoramiento de razas a través de la reproducción de los “más aptos” y la restricción de los “menos aptos”. Este funcionario argentino llegó a hacer mención de la creación de un “tipo argentino ideal”, una ideología vinculada a la de la superioridad de la raza aria del nazismo.
Carrillo aparece también mencionado con sus presuntos lazos en el libro “Perón y la raza argentina: los médicos nazis y el plan para replicar los experimentos de manipulación genética en Argentina”.
“Murió a los cincuenta años, pobre, enfermo y exiliado en Belem do Pará, ciudad del norte del Brasil, el 20 de diciembre de 1956. Quizás pensando, como lo hizo el gran libertador Simón Bolívar, que había arado en el mar… Quizás una de sus frases más célebres nos indique que aún su obra está inconclusa: ‘Frente a las enfermedades que genera la miseria, frente a la tristeza, la angustia y el infortunio social de los pueblos, los microbios, como causas de enfermedad, son unas pobres causas.'”, escribió Marcos Ordóñez sobre su muerte, en su artículo “Ramón Carrillo, el Gran Sanitarista Argentino”.