El director de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), Pablo Díaz, lleva dos meses en el cargo. Contó que con el apoyo del Gobierno de la Provincia que encabeza Osvaldo Jaldo, la repartición que lidera desde hace dos meses está llevando a cabo diferentes obras por administración. Mencionó que están repavimentando la ruta provincial 325, entre Monteros y la ruta 324.
“Son siete kilómetros de repavimentación, con reacondicionamiento de banquinas, y se termina con señalización, la demarcación de la ruta como la cartelería vertical. Tiene una inversión bastante importante a través de la Provincia y del Ministerio de Obras Públicas”, manifestó.
El ingeniero civil, que se desempeñó durante varios años en la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), consignó también que quizá la obra más emblemática que están llevado a cabo actualmente es la repavimentación de la ruta provincial 307, en el tramo que va desde el Infiernillo hasta la intersección con la ruta nacional 40, que culmina con un puente sobre el río Santa María.
“El primer tramo es de un convenio con la Nación, una obra de $17.000 millones, mientras que hay otro tramo que se ejecuta con fondos provinciales con una inversión de $4.500 millones, que tendría la carpeta asfáltica lista para mediados de noviembre. “Como lo anunció el gobernador, la intención sería hacer a continuación el otro tramo de la 307, que sería de Amaicha a Santamaría (se iniciaría en enero)”, expresó.
Caminos provinciales
Entre otras ejecuciones que se encuentran activas, mencionó la ruta 304 (Taruca Pampa), y que está próximo a iniciarse los trabajos de repavimentación en la ruta 329, entre La Trinidad y Monteagudo. “Es una obra muy importante que va a encarar la repartición. Son unos 21 kilómetros que se van a hacer por administración, todo con equipo y personal propio”, destacó.
Consultado sobre los cuestionamientos que viene lanzando un sector productivo de la provincia respecto al estado de los caminos provinciales, Díaz señaló que se está trabajando en acondicionar las rutas y que desde el año pasado llevan adelante un operativo por la red de caminos del interior. “La provincia se divide en 1.000 kilómetros de rutas que son pavimentadas y 1.000 kilómetros en condiciones de ripio. Son caminos que constantemente necesitan mantenimiento”, dijo y precisó que las mayores complicaciones se dan cuando comienza la época de lluvias porque las aguas se desbordan y rompen los caminos.
En cuanto a la situación interna de la repartición, Díaz contó que uno de los mayores problemas que tenían eran los tiempos para llevar a cabo los trámites administrativos, especialmente en un contexto inflacionario. Consignó que han logrado reducir esos tiempos de hasta cuatro meses a no más de 20 días. Destacó también que desde el año pasado vienen trabajando en recuperar el laboratorio de Vialidad, así como el parque automotor, que hoy funciona en el orden del 75%.
“Es un desafío muy grande, estoy muy agradecido por la oportunidad. La idea siempre es tratar de levantar la vara, de que la repartición pueda ir mejorando. No sé si somos mejores o peores, pero tratamos de que se manejen las cosas de una manera eficiente para tratar de mejorar. La idea es esa: tratar de levantar la vara cara día”, reflexionó.