El costo de la Canasta Básica Total (CBT), que determina la línea de pobreza de una familia, se desaceleró al 3,4% en abril, y se ubicó por debajo de la inflación general del mes (4,1%), según informó el INDEC este martes.
La CBT para un “adulto equivalente” (varón de entre 30 y 60 años con actividad moderada), subió desde los $19.700 hasta los $20.375. Por lo tanto, una familia de cuatro integrantes (compuesta por un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un niño de 6 años y una niña de 8 años) necesitó $62.958 para no ser considerada pobre, una cifra que equivale a casi tres salarios mínimos.
Paralelamente, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide la línea de indigencia, ascendió un 3,9% desde los $8.312 hasta los $8.633. De esta manera, una familia “tipo” necesitó $26.677 para no ser considerada indigente.
La semana pasada el INDEC informó además de la pobreza y la indigencia que la inflación minorista de abril fue del 4,1% y que la inflación núcleo, que no contempla ni precios regulados por el Gobierno ni ajustes por factores estacionales, fue del 4,6%.
Lo que más subió en el cuarto mes del año fue la indumentaria (+6%), que ya había registrado un importante salto en marzo a partir del cambio de temporada en ropas exteriores. Detrás le siguieron las subas en transporte (+5,7%), impulsadas por correcciones alcistas en naftas, adquisición de vehículos y en la tarifa de los taxis.
El podio lo completó, con una leve desaceleración, el rubro de alimentos y bebidas (+4,3%). Los aumentos a nivel nacional fueron traccionados por lácteos, aceites, productos para infusiones, pan y cereales, y carnes.
En lo que va del año los precios subieron 17,6% a nivel general. En el mismo período, la CBA creció en la misma proporción mientras que la CBT ascendió algo menos, un 16,1%.
Paralelamente, en los últimos 12 meses el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el INDEC trepó 46,3%, menos que la CBA (49,1%) y que la CBT (47,8%).
Cabe recordar que la Canasta Básica Alimentaria se determina tomando en cuenta los requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para un adulto equivalente, mientras que la Canasta Básica Total incorpora bienes y servicios no alimentarios.
Vale remarcar, no obstante, que la CBT no contempla, por ejemplo, el costo de un alquiler. Según datos del INDEC, casi el 20% de los habitantes del país son inquilinos mientras que en la Ciudad de Buenos Aires ese número es superior al 35% según relevamiento de 2018.