Rodeado por las críticas internaciones e internas, Maduro asumió hace 15 días la presidencia. Un argentino contó como es vivir en ese país. Los exiliados en Tucumán.
En medio de tensiones con la oposición y bajo la atenta mirada de decenas de países que no aprueban su autoproclamación como presidente, Nicolás Maduro asumió hace 15 días su tercer mandato en Venezuela y prometió tener un gobierno donde predomine “la paz, la prosperidad, la igualdad y la nueva democracia”.
El chavista, que está en el poder desde marzo de 2013, fue declarado ganador tanto por la autoridad electoral como por el máximo tribunal, aunque no se publicaron los recuentos detallados que confirmen su victoria. La oposición sostiene que hubo fraude y que, en realidad, fue electo el opositor Edmundo González Urrutia.
En diálogo con LA GACETA, Sergio Vázquez, argentino que vive en Venezuela, contó de qué manera se viven los primeros días de Maduro como presidente electo, describió cuáles son las expectativas de la sociedad y señaló que tiene temor de vivir en ese país como extranjero. “Soy guía turístico en Mérida (en la región de los Andes) y durante las primeras semanas tuvimos que suspender los tours, por la tensión que se vive. Casi no se habla por WhatsApp, hay mucho miedo”, contó en relación a las jornadas previas y posteriores a la asunción.
El hombre aseguró que la sociedad rechaza a Maduro. “Nadie quiere vivir bajo su dictadura. Todos tienen familiares que se fueron de Venezuela por la situación y se fueron por obligación. Hasta los mismos policías y otras fuerzas de seguridad están en su contra”, explicó.
Sobre las expectativas que tiene el pueblo venezolano con un nuevo gobierno, el argentino fue contundente: “va a seguir gobernando con el miedo. Destacamos que las sanciones internacionales hayan hecho que la economía mejore un poco, porque la plata que se robaban la tienen que invertir, pero socialmente no se puede vivir. Hasta para cargar nafta o comprar una garrafa tenés que hacerlo según tu número de documento, no podés hacerlo cualquier día y ni siquiera aceptan transferencias”, comentó. “Tenía que ir a Caracas a ver a mi novia y no pude, hay mucha policía haciendo controles en las calles y tengo miedo que al ser argentino me detengan. Este Gobierno no puede mejorar nada, se tiene que ir”, cuestionó.
“La lucha sigue”
Desde El Tigre, al sureste de Caracas, Yanireth contó a LA GACETA el despliegue militar que se llevó a cabo en las principales ciudades de Venezuela. “Se generó mucha tensión, pero la gente salió igual a protestar y demostramos que no tenemos miedo. Cuando nos enteramos del secuestro de María Corina (Machado) todo el mundo estuvo en silencio y se sentía el caos, la desesperación. Eso significaba pensar cómo seguimos si ella era tomada por el régimen de Maduro. Nos ayudó la presión internacional”, dijo. “A Maduro todos lo ven como un dictador”, expresó la mujer, que pidió a este diario no publicar su nombre completo por temor a represalias.
Desde Tucumán
Ana Rondón, venezolana radicada en Tucumán desde hace ocho años, contó de qué manera vive su comunidad lo que sucede en su país. “Nos genera mucha ansiedad, ojalá las cosas mejoren. Mis paisanos están censurados, la prensa trata de entrevistarlos y ellos no quieren mostrar el rostro, no quieren hacer comentarios para cuidar a sus familiares. Hay mucha censura en los medios y en Whatsapp. No se puede hablar de nada”, relató.
Según Rondón, la compleja situación comenzó hace 25 años y fue empeorando con el paso del tiempo. “Yo trabajaba en una facultad y era directora en una escuela, y no me alcanzaba. Ahora hay apagones, es como si vivieras en un país en guerra. Hay mucha venta de drogas y mafias, todo por la situación de crisis que se vive”, describió.
Lamentó el nivel de “destrucción” en su país. Rondón aseguró que, sin embargo, la comunidad no pierde la fe. “Las dictaduras tardan, pero tenemos esperanza que va a llegar el cambio”, cerró.
Amenaza con una “lucha armada”
Las críticas de parte de la comunidad internacional a la asunción de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela generaron la reacción del chavista. Cercado por un sector de países que no lo reconoce como presidente, aseguró que se prepara para una “lucha armada” si es que hay injerencia de otras naciones en su país. Durante un acto oficial en Caracas, expresó que los ciudadanos y las fuerzas armadas deben estar preparados para “defender la democracia y la paz” ante posibles intromisiones.
“No estamos jugando. Nos estamos preparando, permanentemente, para la lucha armada en defensa de la democracia, de la paz, de la institucionalidad, de la estabilidad y del derecho al futuro de Venezuela”, consignó Maduro.
Presentó el “Escudo Bolivariano 2025”, un conjunto de fuerzas oficiales y otras integradas por civiles para confrontar al “asedio” externo. En total, el despliegue implica 150.000 agentes.
El opositor Edmundo González Urrutia continúa con su gira internacional. Se reunirá mañana con el mandatario ecuatoriano, Daniel Noboa, en Quito. “El presidente electo de Venezuela, Edmundo González, cumplirá una agenda en el país”, señaló el Ejecutivo en su cuenta en la red X. Agregó que durante su visita, González Urrutia mantendrá una reunión oficial con Noboa, así como con la comunidad de venezolanos en el país.
La oposición venezolana asegura que su candidato González Urrutia ganó con un 70% de votos los comicios de julio. La autoridad electoral de Venezuela proclamó a Maduro ganador con 52% de los sufragios, pero no ha publicado el escrutinio detallado, como manda la ley.
En su comunicado, el gobierno ecuatoriano expresó que “reafirma su compromiso con la democracia y los valores que la sustentan, así como su rechazo a la dictadura de Nicolás Maduro”.
González Urrutia se asiló en España en setiembre, luego de que en Venezuela se emitiera una orden de arresto en su contra. Desde entonces recorrió varios países para reunir más apoyo en su postura contra del régimen vigente.
El disidente es avalado también por Estados Unidos, Italia, Argentina, Uruguay, Perú, Panamá y Costa Rica. Mientras que Maduro fue reconocido por Rusia, China, Irán, Cuba, Nicaragua, Corea del Norte, Bielorrusia, Turquía y Qatar. (Con información de AFP)
