La presión política externa recae con mayor fuerza sobre Nicolás Maduro, luego el escándalo electoral del fin de semana. El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, pedirá a la Corte Penal Internacional el arresto del presidente venezolano, a quien lo acusó de llevar a cabo un “baño de sangre”.
“Vamos a solicitar la imputación de cargos con orden de aprehensión”, anunció Luis Almagro. El funcionario de la dijo que el presidente venezolano “dirigió la instrucción de la implementación de la represión” contra el pueblo luego de las elecciones.
Una sesión extraordinaria
“Es hora de la Justicia y nosotros vamos a solicitar la imputación de cargos con orden de aprehensión”, remarcó Almagro. Lo dijo en una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, que se realizó en Washington. Además invitó a los Estados miembros a sumarse a la petición.
El secretario general dijo que “teniendo en cuenta” la investigación que lleva a cabo la Fiscalía de la CPI sobre presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela desde 2014. “Maduro anunció un baño de sangre y lo está cumpliendo”, insistió el político uruguayo al referirse a los al menos 16 manifestantes muertos en las protestas en contra del Gobierno venezolano tras las elecciones del domingo.
La oposición rechazó los resultados
“Fue algo que impresionó cuando lo dijo, pero me impresiona mucho más cuando lo está haciendo”, advirtió. La crisis en Venezuela se profundizó desde que el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó la victoria de Maduro en las elecciones del pasado domingo. La oposición rechazó esos resultados y exigió ver las actas de votación para verificar el resultado.
Sin embargo, la OEA no logró ayer la mayoría suficiente para aprobar una resolución que exigía verificar los resultados en Venezuela, debido a la abstención o ausencia de países como Brasil, Colombia y México.
