“Ahora aparecen y proliferan marcas La Pindonga o Cuchuflito que nadie conoce“, dijo Cristina Kirchner, ex presidente y actual candidata a vice, e instaló la polémica (una de tantas luego de su discurso de presentación de su libro “Sinceramente”, en Mar del Plata, el viernes pasado).
Como viene informando Infobae, en los últimos meses las segundas marcas no paran de ganar terreno en las preferencias de los argentinos en las góndolas. La crisis pegó fuerte, la inflación castiga los bolsillos y la gran mayoría se ve obligada a ajustar sus presupuestos.
“El consumo masivo cae 10,5% en el acumulado del primer semestre del año. Las ventas minoristas de acuerdo a la CAME presentan una baja para el mismo período del 12,2 %. Las transacciones, con una variación del -4,55% vs en el mismo periodo, nos indican que continúa la tendencia de menos unidades por cada compra. Sin embargo, hay marcas dentro de ciertas categorías de productos que resultan ganadores incluso en el actual contexto”, asegura Damián Di Pace, director de Focus Market.
Según datos de la consultora, desde 2016 a 2019 las “marcas mayoristas y económicas” pasaron de un participación del 32,6% al 42,8% en unidades y del 21,5% al 27,7% en facturación. Así, algunas marcas por categoría que se están subiendo al podio de los colosos del consumo masivo son:
– Gaseosas: Manaos, Secco y Cunnington
– Galletitas: Pitusas, Don Satur, Gaona, Okebón y Tym
– Leche: La Martona y Apostoles
– Quesos: Barraza y Punta del Agua
– Cervezas: Scheneider e Isenbeck
– Aceites: Marolio
– Purés de tomates: Molto
“En precios por segmento, en el primer trimestre de 2019 el crecimiento de estas segundas marcas en consumo masivo fue del 5% y en facturación del 4,3%. En unidades las marcas ‘Pindonga y Cuchuflito’ alcanzan el 42,8% de los productos vendidos en el canal de consumo masivo”, detalla Di Pace.
Una encuesta de D’Alessio/IROL, en tanto, detalla que ocho de cada diez consumidores se pasaron a segundas marcas y las utilizan en un rango del 20 al 60 por ciento de sus categorías de compras.
“Creemos que el consumidor valora a aquellas marcas que lo acompañan en momentos difíciles. Protegiéndolo y poniéndonos de su lado, estamos construyendo esa relación a futuro. Por eso el año pasado no trasladamos la totalidad de las subas de costos y resignamos márgenes. Nuestro crecimiento refleja que el consumidor lo reconoce y lo valora”, aseguro Julián Mellicovsky, uno de los dueños de Ecovita, una fábrica del conurbano de con 70 productos de higiene y limpieza.
“Somos entre un 10% y 30% más baratos que primeras marcas. Por ejemplo, un jabón líquido de 800 ml nuestro cuesta unos $70, versus entre $90 y $130 de las más conocidas”. Según la empresa, estos productos tuvieron un 30% de crecimiento en litros producidos en lo que va del año.
Mellicovsky describe que el auge de las segundas marcas en realidad es un fenómeno mundial y algo que viene ocurriendo hace muchos años. “Muchos piensan que es sólo un producto de la crisis e infieren que cuando termine el consumidor va a volver a las marcas tradicionales. Pero en realidad estamos ante un consumidor cada vez más abierto a la hora de comprar, y más informado e inteligente, que comprendió y comprobó que existen alternativas de igual o mejor calidad que las marcas que venían comprando, y a menor precio“, detalla.
“Desde 2016, este segmento ganó mercado con mucho esfuerzo y generando empleo“, asegura Di Pace.
“Dentro de las categorías donde las marcas económicas ganan más terreno en forma interanual se encuentran cerveza, gaseosas, harina, salchichas y aceite. Sin embargo cuando lo analizamos por nivel de penetración de mercado en las que mayor participación tienen es en enlatados, puré de tomate, detergentes, pastas secas, entre otros”, detalla en analista.
Mañana martes se conocerán los datos del Indec sobre ventas en supermercados. Según la última cifra disponible, en abril las ventas en grandes cadenas a precios constantes (base de diciembre de 2016) sumaron un total de $23.097,7 millones, lo que representa una caída de 6,4% respecto al mes anterior y una caída del 12,6% respecto a abril de 2018.