“Te mando en cana toda la feria”, “te encajo un tiro en la cabeza” y “yo manejo el poder”, así amenazó la jueza chaqueña Laura Verónica Buyatti a un albañil que le reclamaba una deuda por los trabajos que le había hecho a su exmarido en una serie de mensajes de audio. El caso provocó un fuerte revuelo y la Fiscalía abrió una investigación por amenazas agravadas y abuso de poder.
La víctima, Marcelo Acosta, aseguró que la titular del Juzgado de Niñez, Adolescencia y Familia 1 de Villa Ángela y un hombre al que identificó como “su marido” le deben una suma cercana a los 300 mil pesos. Para visibilizar su reclamo, el hombre se había dirigido a la comisaría y había anunciado que se encadenaría a su casa hasta que le den el dinero.
El hombre también grabó las llamadas que le hizo la propia Buyatti y los audios fueron difundidos por el diario InfoQom. En total son 4 minutos y 12 segundos de insultos y amenazas.
“Vos me seguís mandando estos audios, son cuatro negros de mierda. Vos me seguís mandando estos audios, yo los agarro como prueba. Tengo todo confirmado. Vos me seguís molestando, te mando a la cana”, comienza la jueza la conversación.
“Usted me amenazó”, le contestó Acosta. “Son cinco negros de m… que arruinan el país”, le retrucó la Buyatti. “Yo quiero que su esposo me pague”, respondió el albañil.
Entonces la mujer insistió con que ya se lo había pagado por su trabajo y volvió a amenazar con meterlo preso: “Enseguida te va a caer la cana, papi. Vos me seguís molestando, te juro que te hago pasar toda la feria en cana”.
“¿Vos sos p…? ¡Yo soy diez veces más p… y encima soy mujer! ¡Soy mujer, papito, soy mujer! ¡Soy mu-jer! Estamos en la era de la mujer”, continuó Buyatti, según el diario Clarín.
Tras calificar al intento de encadenamiento del obrero a su casa como “violación de domicilio”, la jueza amenazó directamente con matarlo: “Vos te venís a encadenar a mi casa, yo salgo con un revólver y te encajo un tiro en la cabeza. Total yo lo conozco al sistema, papi, yo tengo todos los poderes, yo manejo el poder”.
La comunicación siguió con la jueza indicando que no es pareja del hombre a quien le reclaman los pagos. “No te puedo hacer la diferencia porque sos burro, no puedo discutir con un burro”.
Pese a que el hombre le pidió “que no la amenazara”, la jueza volvió a la carga: “Yo soy una jueza, así que conmigo atenete. Vos me nombraste, conmigo atenete a las consecuencias. No me mandes más, porque yo te mando hasta después de Año Nuevo, no, hasta después de la feria, que yo quedo de feria… ¿me escuchaste?”.
“Anoche me vinieron a molestar a las 10 de la noche los canas porque vos te ibas a venir a encadenar. Entonces, te venís a encadenar, yo te encajo un tiro en el medio de la frente. ¿Me escuchaste?”, agregó.
Acosta intentó calmarla y volvió a reclamar por el dinero que le debían: “No me hable así, doña. Yo no le hago nada. Queremos nuestra platita, que nos paguen miseria, nada más”.
El intento fue en vano, la jueza redobló los insultos: “Andá a laburar, papi. Andá a laburar, planero de m… Planeros de m… ¡Planeros!”.
Tras la viralización de los audios, la Jueza de Garantías de Villa Ángela, Yolanda Alvarenga de Gómez Samela, investiga a Buyatti. En tanto, los fiscales de la Procuración General ya pidieron que se abra una investigación jurisdiccional.
La decisión fue de oficio, después de tomar “conocimiento a través de redes sociales y portales (…) de una presunta conversación telefónica”. Se analiza si la conducta de la magistrada se encuadra en los delitos de amenazas agravadas y abuso de poder en concurso ideal.
“Quiero arreglar mi trabajo, que le paguen a la gente y quiero que se haga justicia”, le dijo el albañil Acosta a InfoTAG.
Por su parte, la jueza Buyatti aseguró que la deuda es de su expareja, José Álvarez Tovar, por lo que aseguró que fue “usada”. También dijo sufrir ataques de pánico y minimizó a las amenazas al asegurar que eran solo “cosas que se dicen en una discusión”.
“Estaba sacada, ellos venían mandándome mensajes hace días”, explicó Buyatti a Diario Chaco. En su versión, también fue amenazada en su domicilio a las 23.30 horas cuando salía para pasear a su mascota. Le preguntaron por su expareja y ella les contestó que vivía sola, a lo cual le dijeron que al día sigueinte se iban a encadenar a su casa.
“Exploté como cualquier persona normal. Están usando mi imagen para sacar plata, conseguí el número y les dije de todo porque una persona bajo esa presión ya explota y eso querían”, sostuvo.
“Si entre hombres está bien gritarse, bardearse y patotear, volvemos al machismo puro. La mujer callada, sumisa y lavando platos. A mí, si me atacan, voy a defender mi integridad física, la de mi hija y mi casa”, siguió Buyatti.
Y concluyó: “Los derechos de la mujer al tacho, ellos pueden ir a tu casa y patotearte y vos calladita”.