Otra vez la violencia fue protagonista a la salida de un boliche; esta vez en la ciudad de Córdoba. Fue en la madrugada del domingo y la víctima, un joven que salía de bailar del Estadio del Centro, fue atacado con salvajismo por una patota y sobrevivió gracias a las maniobras de RCP que le practicó una chica.
“Me acordé de Fernando Báez Sosa, fue lo único que se me vino a la mente”, contó después a El Doce Trinidad Toledo, sobre el momento en el que vio a la víctima, inconsciente y tirado en el medio de la calle, después de recibir patadas en la cabeza, haciendo alusión a la tragedia de Villa Gesell por la que a principios de este año cinco de los ocho rugbiers que participaron en la paliza fueron condenados a prisión perpetua.
El hecho que salió a la luz después de que se viralizaran los videos en las redes sucedió el domingo cerca de las 5.30, en el cruce de avenida Santa Fe y la vera del río Suquía, en el barrio Alberdi. Allí fue donde Ángel Berón se cruzó con los tres agresores y casi termina muerto.
“Le hice RCP a un chico que le patearon la cabeza a la salida del estadio y después de 10 minutos logré que se despertara, no se imaginan lo que fue y cómo me siento”, escribió Trinidad, de 23 años, en su cuenta de Twitter. La publicación fue a las 5.38, apenas unos minutos después del episodio.
El tuit que publicó la joven junto a un video del momento en que le había RCP a Berón desató una catarata de comentarios, entre los que llegó también el agradecimiento de un familiar del joven agredido. “Hola, es mi hermano al que salvaste hoy. Gracias a Dios y a ti está bien en casa”, escribió Lorena Berón.
Más tarde, Trinidad sumó detalles de lo ocurrido en distintas entrevistas con los medios locales. “Lo vi y se me apareció la imagen de Fernando Báez Sosa. Fue un impulso. Por dentro me dije: ‘No habrá otro Fernando’. Recordé lo que había hecho Virginia y actué”, manifestó en diálogo con La Voz. La referencia es para la chica que le practicó RCP a Báez Sosa.
Ángel fue trasladado por sus propios amigos al Hospital del Noreste Elpidio Torres, donde permaneció internado varias horas en observación y ya recibió el alta. En tanto, su familia radicó la denuncia correspondiente ante la Unidad Judicial.