Luego de la crisis económica global más importante de los últimos 70 años, la Argentina goza de un empujón considerable gracias al rebote de la demanda global por materias primas y el pico de precios de la soja, el maíz y otros productos agroindustriales. La Cámara de la Industria Aceitera-Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC) informó que en mayo el sector ingresó al mercado de cambios más de USD 3.500 millones en liquidaciones de exportaciones. Es el número más alto para un mes de mayo del que se tenga registro y el acumulado en los primeros cinco meses del año supera todas las marcas desde 2003 a esta parte.
Ciara-CEC, conformada por entidades que representan el 48 % de las exportaciones argentinas, anunciaron que durante el último mes de mayo las empresas del sector liquidaron la suma de 3.545.921.486 dólares. El ingreso de divisas acumulado de la agroexportación en los primeros cinco meses del año alcanzó los 13.301.331.434 dólares.
“Ese monto de mayo pasado resulta récord para ese mesen las estadísticas de los últimos 18 años. Esa suma representa también un incremento del 16,9 % con respecto al precedente mes abril y del 82,2 % superior en relación con el mismo mes del año anterior”, detalló el comunicado de la cámara empresaria.
“Nuevamente, el saldo de exportación agroindustrial es reflejo del incremento de los precios internacionales de los commodities, a pesar de un paro de gremios marítimos y la persistente bajante del río Paraná, en Santa Fe”, agregó el comunicado.
La enorme disponibilidad de divisas producto de exportaciones del sector agropecuario permitió al Banco Central comprar casi USD 2.100 millones en mayo. Es el mayor nivel de adquisiciones para la autoridad monetaria desde noviembre de 2019, cuando se adelantaron liquidaciones por la expectativa -finalmente concretada- de un aumento en las retenciones a las exportaciones tras la llegada de Alberto Fernández a la presidencia de la Nación..
En seis meses, a partir de diciembre del año pasado, el saldo neto a favor del Central asciende a más de USD 6.300 millones, y unos USD 5.730 millones en cinco meses de 2021. Como contrapartida, la inyección de pesos que hace la entidad para pagar por esas compras de divisas es hasta ahora la principal fuente de emisión monetaria en lo que va del año, con $516.589 millones volcados hasta el momento.“El saldo de exportación agroindustrial es reflejo del incremento de los precios internacionales de los commodities, a pesar de un paro de gremios marítimos y la persistente bajante del río Paraná, en Santa Fe” (Ciara-CEC)
La acumulación de reservas por parte de la entidad que conducen Miguel Pesce aporta poder de fuego para sostener la calma cambiaria posterior a octubre del año pasado, cuando el dólar libre rozó los $200. Las divisas recomponen el nivel de reservas netas de la entidad y parte de ellas se vuelcan a los mercados de dólar MEP y dólar contado con liquidación -las cotizaciones paralelas que se operan en la Bolsa- para mantener a raya a la brecha cambiaria.
“La liquidación de divisas está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial. La mayor parte del ingreso de divisas en este sector se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y alcanza hasta los 90 días en el caso de la exportación de aceites y harinas proteicas. Esa anticipación depende también del momento de la campaña y del grano de que se trate, por lo que no existen retrasos en la liquidación de divisas”, explicó Ciara-CEC en su comunicado.
“En este sector, las comparaciones estadísticas entre distintos períodos son generalmente imprecisas o inexactas ya que la liquidación de divisas está fuertemente influida por el ciclo comercial de los granos, que depende de diversos y cambiantes factores exógenos como oscilaciones internacionales de precios, retracción de la oferta, distinto volumen y valor proteico de las cosechas, condiciones climáticas, feriados, medidas de fuerza sindicales, modificaciones regulatorias, barreras arancelarias y para arancelarias del exterior, exigencias fitosanitarias o de calidad de otros países, etcétera”, agregó.
“El complejo oleaginoso-cerealero, incluyendo al biodiésel y sus derivados, aportó el año pasado el 48% del total de las exportaciones de la Argentina, según datos del INDEC”, detalló Ciara-CEC. “El principal producto de exportación del país es la harina de soja (14,2 % del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial, que tiene actualmente una elevada capacidad ociosa cercana al 50%. El segundo producto más exportado el año pasado, de acuerdo con el INDEC, fue el maíz (11 %) y el tercero fue el aceite de soja (6,9 %)”, concluyó.