Distintas consultoras relevaron los aumentos de precios durante el mes de abril y todas coinciden que el porcentaje de inflación será nuevamente del 4%,. Con estos guarismo, la meta del 29% de inflación anual impuesta por el gobierno nacional en el presupuesto 2021 quedará aún más díficil de cumplir.
Luego del 4,8% de marzo, los precios en abril siguen con significativos aumentos principalmente en el rubro de los alimentos y bebidas.
El relevamiento realizado por la consultora LCG remarca que las carnes volvieron a liderar los aumentos, seguido por el azúcar, miel y las bebidas e infusiones. En cuanto a los resultados semanales, arrojó un incremento de 0,8% para la tercera semana de abril. Si bien no es de los datos más altos para una tercera semana, lleva al acumulado mensual a 3,2% y deja una inflación mensual promedio de 4,6% para las últimas cuatro semanas.
Otros relevamientos privados que salieron los últimos días ratifican el rumbo de los precios. El de FIEL, que se lleva a cabo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, dejó en las primeras dos semanas de abril aumentos de 1,1% y 0,7%, respectivamente, por lo que de mantenerse en las últimas dos semanas del mes quedaría nuevamente más cerca del 4% que del 3%.
Por su parte, el índice de precios de alta frecuencia de Seido mostró una tendencia similar. En las primeras tres semanas de abril registró una suba algo menor en el nivel general, de 2,5%, aunque mensualizado deja un 3,3%. Un mal dato en la última semana podría acercar la cifra todavía más a 4%.
En tanto, la consultora Ecolatina detectó en la primera quincena un aumento intermensual del 4,5% en su relevamiento en el Gran Buenos Aires, aunque esperan cierta desaceleración para la segunda mitad del año, pero sin que se perfore el 4% promedio en el mes.
En cuanto a alimentos y bebidas, Ecolatina proyecta que crecerán por debajo del nivel general, a un ritmo de 3,5%, mientras que las mayores subas serán los vinculados a indumentaria y subas puntuales en prepagas, combustibles, expensas, y taxis. Para el año, proyecta una inflación de 42,5%, muy por encima de la meta oficial de 29%, que requiere para su cumplimiento un promedio mensual de 1,5% para los nueve meses restantes del año.