El festejo alocado de los jugadores en la cancha y la emoción hasta las lágrimas de Santiago Gómez Cora al costado reflejan el verdadero valor de esta conquista. Con una agónica victoria 14-10 ante Sudáfrica, el seleccionado argentino de seven logró el quinto puesto en la etapa de Singapur y finalizó primero en la temporada regular del Circuito Mundial. Una hazaña para un equipo que tradicionalmente estaba relegado a un lugar secundario pero que gracias a un proceso de muchos años logró convertirse en una potencia.
A partir de esta temporada, World Rugby introdujo cambios en el Circuito y dispuso que el campeón se consagre en un único certamen en lugar de la suma acumulada de cada una de las etapas, como ocurrió desde que vio la luz en 1999/2000, además de reducir de 16 a 12 el número de participantes y de diez a siete la cantidad de torneos. La gran definición, entonces, se producirá en el Seven de Madrid, a disputarse del 31 del corriente al 2 de junio en el Estadio Metropolitano, la cancha del Atlético, con los ocho mejores de la instancia regular. Al margen de lo que ocurra allí, nada opacará lo que consiguieron los Pumas 7s en esta campaña.
“No puedo creerlo. Luché por esto toda mi carrera como jugador y ahora como entrenador. No lo puedo creer”, insistió Gómez Cora entrevistado por la televisión apenas finalizado el partido, sin ocultar su emoción. “Estamos muy orgullosos de lo que logramos. Ahora la gente sabe quiénes somos. Pusimos a la Argentina como uno de los líderes, no somos más unos outsiders. Queremos que más chicos se vuelquen a los clubes a jugar al rugby”.
Un tercer puesto en la temporada 2003/04, con Gómez Cora como jugador, había sido su mejor ubicación gracias a la conquista del Seven de Los Ángeles y un subcampeonato en Hong Kong. Desde entonces, nunca habían podido mejorar un quinto puesto y sólo habían ganado un certamen más, en San Diego 2009. El cambio comenzó en 2013, cuando Gómez Cora, que un par de años antes se había retirado con el rótulo de tryman histórico del certamen, asumió la conducción técnica del seleccionado. A partir de allí inició un trabajo serio, a largo plazo, con objetivos claros y fundado en el esfuerzo y la dedicación absoluta. La transformación fue paulatina y los resultados se empezaron a ver con el tiempo.
Un primer hito fue la medalla de bronce lograda en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (disputados en 2021), lo que infló de confianza a un plantel con jugadores que empezaban a sobresalir. Otra barrera quebrada fue la conquista del Seven de Vancouver en 2022, cuando cortaron una racha de 13 años sin títulos y finalizaron cuartos en la temporada. La explosión llegó en la campaña 2022/23: los Pumas 7s conquistaron tres títulos más y llegaron a otras tres finales para finalizar segundos detrás de Nueva Zelanda. Prolongar el buen momento a esta temporada, que comenzó con cuatro finales y tres títulos consecutivos, lo que a la larga le valió quedarse con el primer lugar pese a que en los últimos tres certámenes levantaron un poco el pie del acelerador.
La Argentina necesitaba finalizar quinta en Singapur para asegurarse el primer puesto en la temporada o esperar que Irlanda no fuera campeón. El tercer día de acción comenzó con el pase de los irlandeses a la final gracias al triunfo ante Gran Bretaña, lo que puso más presión sobre los argentinos, que se vieron obligados a vencer a Sudáfrica para no depender del desenlace.
La victoria ante los sudafricanos no fue más que un reflejo de la esencia de este equipo de Pumas 7s. Los Blitzbokke dominaron al inicio, monopolizaron la posesión y se instalaron en territorio de los argentinos, que se dedicaron a tacklear pero les costaba tener la pelota. Así, el rival se adelantó 10-0. Pero el equipo nunca perdió la templanza ni la confianza. Con tres minutos por jugar, logró el descuento por obra de Agustín Fraga luego de un gran pase de Tobías Wade, que asistió a su compañero cacheteando la pelota hacia atrás.
Tras recuperar la posesión en una acción inmediata a la salida, los argentinos se pusieron en ataque con segundos por jugar y la victoria parecía inminente, pero hasta allí debieron sufrir. A metros del in-goal, perdieron la pelota y parecía que se esfumaba la posibilidad de la victoria, pero con un gran tackle de Wade y una pesca crucial de Tomás Elizalde la recuperaron rápidamente y Wade aprovechó que Sudáfrica quedó mal posicionado para escaparse solo al try. Hubo tiempo para una más, pero los argentinos lograron neutralizar el ataque y cuando terminó el partido se desató un festejo que comprendió risas y llantos por igual.
“Hoy es uno de los días más felices de mi vida. Trabajamos un montón durante muchos años y conseguir este logro significa muchísimo para nosotros. Estamos muy felices”, resumió el legendario Gastón Revol antes de recibir el premio. “La presión está siempre, la sentimos hoy, pero también estamos preparados y sabíamos que podíamos ganar. Esa fue la clave, tuvimos confianza en nosotros y en la capacidad de nuestros jugadores.”
Disputados los siete certámenes de la etapa regular, la Argentina finalizó con 106 puntos. La campaña incluyó un segundo puesto en Dubai, títulos consecutivos en Ciudad del Cabo, Perth y Vancouver, quintos puestos en Los Ángeles y Singapur y noveno en Hong Kong. En la definición, Irlanda cayó ante Nueva Zelanda 17-14 y finalizó con 104. Los All Blacks, que habían comenzado la temporada de manera irregular, cerraron con dos títulos consecutivos y terminaron terceros con 93.
Queda la definición en Madrid y luego París 2024. Pase lo que pase, nadie les quitará este logro. Los Pumas 7s están en la cima del mundo.
