SAN JUAN (Enviado especial).- El festejo de la victoria dejó secuelas en Marcelo Orrego, gobernador electo de San Juan. La caravana que protagonizó por el centro de esta ciudad terminó de madrugada y las bajas temperaturas lo dejaron con un estado febril y una incipiente disfonía que disimula con medicación. Horas después de su triunfo, con el que puso fin a 20 años consecutivos de gobiernos peronistas en la provincia, el diputado nacional dialoga con un grupo de medios nacionales, entre ellos LA NACION, y promete derogar la ley de lemas, con la que se votó el domingo. También, propone volver al sistema de una única reelección para los gobernadores y vicegobernadores. Alineado a nivel nacional con Horacio Rodríguez Larreta, quien festejó con él en el búnker ganador, rescata igualmente a Patricia Bullrich.
“Voy a derogar la ley de lemas, lo voy a enviar a la Cámara de Diputados. Nos hemos metido en el lote de provincias como Formosa y Santa Cruz, donde hace 30 años gobiernan los mismos. Yo creo en la alternancia. Voy a llamar a un plebiscito o una enmienda para volver al sistema que teníamos antes: el gobernador no tiene que durar 12 años, tiene que durar 4 años y, si la gente estima que lo ha hecho bien, cuatro más y que venga otro gobernador”, define Orrego, en el salón de un hotel del departamento de Santa Lucía, donde fue intendente y actualmente gobierna su hermano, Juan José.
– ¿Lo favoreció el cambio de candidato en el oficialismo?
– No lo sé. Fue una situación extraña y cambiaron los protagonistas. Pero me he preocupado más por tratar de llegar con nuestra oferta electoral a los 19 departamentos de la provincia, sin pensar tanto en los cambios que podían producirse en otro espacio político. Son parte del mismo proceso kirchnerista y, para colmo, en este caso son hermanos. Uno, Sergio, y el otro, Rubén, pero los dos son Uñac.
– En el festejo dijo que no le iba a temblar el pulso para tomar medidas, y que iba a mantener políticas positivas de Uñac, ¿Cuáles serían las cosas que hará y las que mantendrá?
– San Juan tiene 89.000 km2, un 3% del espacio cultivable, lo demás es desierto y montañas. Hay que despertar la agricultura, la producción, hay que trabajar mucho por una minería responsable y amigable con el medio ambiente, energías alternativas, que el turismo no sea solo de eventos y que genere trabajo. Todo lo que se hizo bien, lo vamos a mejorar. Pero hay tres áreas que son urgentes. Una es la educación. San Juan está entre las tres provincias que peor calidad educativa tienen, 4 de cada 10 chicos no terminan el secundario en tiempo y forma, un porcentaje menor tiene los conocimientos básicos de matemática y lengua, el 50% de los chicos de 18 a 24 son ni-ni, ni estudian ni trabajan, y estamos en la tierra de Sarmiento, la educación tiene que tener una prioridad. En salud, las estructuras son un envase vacío, porque faltan especialistas, insumos. Y la inseguridad, no hay un sanjuanino que no haya sufrido una situación de inseguridad. Esos tres ejes van a ser fundamentales.
Orrego considera que la elección se “simplificó” para los ciudadanos porque, a diferencia de los comicios de mayo, solo estuvo presente en los cuartos oscuros el tramo de gobernador de las boletas. “Ha sido una elección distinta, por primera vez en 40 años se votó solo la categoría de gobernador y vicegobernador, habiéndose ya votado los otros cargos. La ley de lemas es la ley de la trampa, retrógrada y antigua, lastima la democracia. En esta oportunidad, a la gente se le simplificó, con 10 boletas, y la gente eligió. En mayo, no estábamos preparados materialmente, faltaban pupitres para la cantidad de boletas que había. Una situación extraordinaria que terminó simplificando el camino para que se diera para este lado”, evalúa.
– Siempre habló provincialmente de la elección, pero vino una gran cantidad de dirigentes nacionales a festejar. ¿Cree que este resultado tendrá incidencia en el escenario nacional de la oposición?
– Los referentes nacionales que vinieron ayer abogan por un espacio que es el que conduce Horacio Rodríguez Larreta y ha quedado bien marcada la disputa de la interna, que es lógica. Por ahí, se toma de una manera dura la contienda, pero siempre sucedió. Las fricciones en las internas siempre están; se terminan las internas y, como caballeros, el que pierde acompaña a quien le ha tocado ganar. Así me he preparado yo, me encontraran laburando codo a codo con quien le toque ganar. Está muy bien que, tanto Horacio como Patricia, han garantizado la unión de Juntos por el Cambio, que es lo más importante.
Más allá de rescatar también a Bullrich, que lo visitó antes de las elecciones de mayo, Orrego deja en claro su alineamiento: “Vinieron todos para el 14 de mayo. Los tiempos han cambiado y nos encuentran en medio de una interna. Mis candidatos van a estar en la lista de Horacio, estamos en ese lado, pero con Patricia tengo una relación de respeto y cariño. Ella me ha venido a apoyar, no puedo ser desagradecido con quienes me han venido a apoyar”.
Para el gobernador electo, en San Juan había cansancio por un “proceso de 20 años con solamente dos personas gobernando [por José Luis Gioja y Sergio Uñac]”, por lo que “la gente precisaba un cambio”. Pero también le asigna relevancia a que “el gobierno nacional está totalmente desdibujado y no le encuentra el agujero al mate”. Dice que el presidente Alberto Fernández “ha ido kirchnerizándose” y que “la vicepresidenta lo fue deteriorando y limando”.
Orrego ganó el domingo, pero asumirá recién en diciembre. Tiene por delante una transición de cinco meses con Uñac. “Ayer hablé con él, una conversación que estuvo basada en reconocer la derrota y en abrir los puentes para que la transición sea ordenada. Hemos quedado en hablar para desarrollar esta transición larga. Nosotros no cogobernamos, el gobernador gobierna hasta el 10 de diciembre”, señala el mandatario electo.