La pieza documental fue grabada por el equipo del documentalista personal de Javier Milei, Santiago Oría, en el Salón Blanco de la Casa Rosada. Participaron el periodista Juan Bautista “Tata” Yofre, el ex guerrillero Luis Labraña, y María Fernanda, la hija del capitán Viola, quien fue asesinado tras una emboscada de guerrilleros del ERP en Tucumán.
“Tata” Yofre es un periodista y prolífico escritor de libros que abordaron con detalle los acontecimientos y el tiempo político que se vivió antes, durante y después de la última dictadura, tanto por los crímenes cometidos por el Estado como por las organizaciones guerrilleras que atacaron incluso en democracia, durante el gobierno peronista.
Plan 2025: Karina Milei busca quedarse con el sello de LLA y Caputo diseña un sistema para sumar afiliados en el territorio
En tanto, Labraña fue uno de los más importantes jefes que tuvo la organización Montoneros y quien reveló haber sido el que pronunció por primera vez el número de 30 mil desaparecidos, que luego quedó convertido en símbolo. Y María Fernanda Viola es una de las más activas luchadoras por la denominada “verdad completa”, una corriente que reclama que se contemple a las víctimas de la guerrilla.
“Mientras estaban los Kirchner se habían prohibido hasta los actos que se hacían en el cementerio en homenaje a mi papá. Tengo la esperanza de que se haga justicia, este año van a hacer 50 años desde que mataron a mi papá”, recordó María Fernanda Viola.
Yofre, durante su intervención, sostuvo que “no se contó de manera completa la historia” de los turbulentos años 70. “Lastimosamente, se hizo por plata. El secretario de Derechos Humanos era Eduardo Luis Duhalde, junto con su socio en el estudio Rodolfo Ortega Peña, eran los abogados del ERP. Se hizo por plata, porque hubo un reconocimiento a quienes habían destrozado la Argentina, o iban a destrozar la Argentina, y se quedaron con mucho dinero. Cifras enormes, de aquel entonces y de hoy, 200 mil dólares para cada uno”, recordó.
“La otra razón es que, ¿cómo van a condenar con el terrorismo si el terrorismo estaba en el gobierno de (Néstor) Kirchner; hay que acordarse que fue el presidente que terminó con todo, con el indulto del presidente (Carlos) Menem, con el Punto Final y la Obediencia Debida, que había aceptado Raúl Alfonsín años antes. Estaban en el poder. No solamente sus guerrilleros, los terroristas que habían tomado las armas en aquel entonces, sino también sus ideólogos”.