Finalmente, Félix Abregú, presidente de la Asociación de Puesteros del Mercado del Norte, entabló una acción de AMPARO en contra de la Municipalidad capitalina en protección de los derechos adquiridos de propiedad y al trabajo como puesteros de sus compañeros al haber sido despojados ilegalmente, como así también en protección del derecho a exigir la transparencia y debida administración del municipio con el fin de evitar la corrupción del gobierno municipal.
En definitiva, el pedido a la Justicia pasa por el hecho de que declare la NULIDAD del Decreto Nro. 1503/SOP/22, publicado en el boletín oficial Nro. 30.174 de fecha 24/FEB/2022, mediante el cual se dispuso el “Llamado a Licitación Pública para la Concesión de la Recuperación, Revalorización, Administración, Mantenimiento y Explotación del Edificio del Mercado del Norte de la Ciudad de San Miguel de Tucumán”.
//“Queremos que sea un Mercado, no un Shopping” afirmó el Presidente de la Asociación de Puesteros del Mercado del Norte
Pero también se solicitó la nulidad de todos los actos que dependan de él, en especial de la adjudicación de la Concesión, al tiempo que se ordene el cese de toda obra que se estuviera ejecutando, lo mismo que una eventual explotación. Esto se debe al hecho de que la misma fue otorgada sin la debida autorización del Concejo Deliberante de la Ciudad de San Miguel de Tucumán.
Asimismo, se solicita a la Justicia que reconozca el derecho a los trabajadores respecto de los puestos que explotaban, de los cuales fueron despojados mediante un engaño, argumentándose una supuesta evacuación para protegerlos de un posible colapso del edificio. Y es que se trató de una excusa que se utilizó como un “ardid” para sacarlos por una vía de hecho, sin discutir judicialmente si tenían derecho a estar y explotar los puestos que tenían cada uno hacía muchísimos años, manipulando a la Justicia.
En ese sentido, Abregú profundizó alegando que la maniobra de parte del alfarismo se hizo para evitar discutir judicialmente los derechos de los puesteros como hubiera correspondido, para luego, entregar subrepticiamente la explotación del inmueble a un tercero, a espaldas del Concejo Deliberante y los ciudadanos, en un negocio millonario que levanta sospechas de corrupción.
Es por ello que desde el Municipio se debieran tener en cuenta a los puesteros en el proyecto que se lleve adelante o compensándonos por los perjuicios que se les ha ocasionado mediante un acto ostensiblemente ilegal, ya que esto significó que muchos de ellos se quedaran en la calle, sin trabajo y sin la posibilidad de sostener dignamente a sus familias, al igual que los empleados que muchos de ellos tenían.
Y es que se trata de personas que tenían un puesto en el Mercado del Norte, el cual era su fuente de sustento, habiendo sido despojados ilegalmente en forma permanente de su fuente de trabajo y medio para mantener a sus familias por el Decreto que llamó a licitación para la obra y explotación del Mercado, y la consecuente adjudicación a la empresa IRSA S.A. Por lo que solicitan se les garantice a defender sus derechos que aquí se están viendo afectados.
Lo mismo que ejercer el control de las autoridades, pudiendo interponer acciones judiciales como las de amparo, o las que fueren necesarias y/o pertinentes. En ese marco, los puesteros señalan que la licitación para obra y explotación del Mercado del Norte le cambiará su destino de mercado comunitario y popular, y pasando por alto la necesidad de autorización del Concejo Deliberante (lo cual lo convierte en ilegal).
Algo que los afecta en forma particular (por ser puesteros) y en forma colectiva al conjunto de puesteros del Mercado del Norte que representa la organización que preside Abregú, en tanto, esto los ha privado de los derechos que tenían sobre los puestos que ellos explotaban, dejándolos “en la calle”, sin trabajo y sin medios de sustento para mantener a sus familias y empleados.
Asimismo, debe considerarse que la concesión de obra y explotación del mercado del norte, a la que se llegó luego de engañar a todos los puesteros (y a la justicia) con una evacuación que tuvo como finalidad solo sacarlos del medio para poder hacer un negocio inmobiliario, se concretó ilegalmente, con un Intendente municipal que dispuso del edificio Mercado como si fuera el “dueño”.
Para ello, Germán Alfaro se apartó de las disposiciones legales que regulan el procedimiento de llamado a licitación y adjudicación de concesiones de bienes públicos municipales. En definitiva, en todo el proceso viciado de nulidad hubo algo inconstitucional, antidemocrático y anti republicano de parte del alfarismo porque pasó por encima de las instituciones, tal y como se dejó en claro en la solicitud de medida cautelar, se manifiesta en el amparo presentado por Félix Abregú.