La razón es obvia, con la mitad de la Argentina bajo la línea de pobreza y con 3.900.000 pobres generados desde el 10 de diciembre (a razón de unos 10.833 por día), se prevé que las próximas fiestas sean mucho más austeras de lo habitual.
Es en ese sentido que resulta altamente repudiable que instituciones dependientes del Gobierno Nacional gasten millones de pesos en canastas navideñas de una decena (o más) de productos mientras las reservas, para colmo, se encuentran en negativo.
Por caso, mediante contratación directa, el Teatro Nacional Cervantes, ya señalado en el pasado por la compra de alcohol con hasta 118% de sobreprecio, adquirió “cajas navideñas” con un valor promedio de 3487 pesos cada una.
Las mismas contienen 15 productos entre los que se destacan un champagne de primera marca, vino Malbec y vino blanco; y el costo total asciende a 3.138.300 pesos
En el mismo sentido fue que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), a cargo de Marco Lavagna, adquirió 650 cajas navideñas a 1271 pesos cada una.
Las mismas contienen 10 productos entre los que se encuentran pan dulce, budín de vainilla y budín marmolado; y el costo total de esta compra fue de 2.097.982 pesos.
Es decir, sólo con las dos adquisiciones aquí mencionadas, el Gobierno gastó más de 5 millones de pesos (5.236.282). ¿Cuánto más se habrá gastado teniendo en cuenta la cantidad de dependencias existentes dentro del Estado Nacional?