Un videoperiodista de la agencia Associated Press (AP) captó la que quizá será una de las imágenes más duras del conflicto Rusia-Ucrania.
Una pequeña niña de 6 años llegaba con sus padres en ambulancia al hospital el domingo anterior, después de que su pueblo, en la zona portuaria de Mariupol fuera atacado y ella resultara gravemente herida.
En pijamas de unicornio manchado de sangre y con su cabeza descubierta, la menor fue trasladada de urgencia hacia el centro médico, mientras su mamá se quedaba llorando fuera de la ambulancia.
Adentro del hospital, los doctores la asistían. Oxígeno, maniobras de resucitación y lágrimas. Nada fue suficiente y la menor murió.
“Enseñen esto a Putin”, dijo uno de los médicos que trató de salvarle la vida. “Los ojos de esta niña, y los médicos llorando”, mencionó.
El video del periodista de AP muestra después el cuerpo de la menor en la camilla, cubierto por el abrigo que traía puesto cuando llegó al hospital.
El personal sanitario se mostró claramente afectado por la muerte de la niña. De hecho, en el vídeo principal de esta noticia se puede ver cómo los propios sanitarios acaban rompiendo a llorar. Otro de los profesionales presentes no podía evitar emitir una diatriba llena de improperios contra el presidente ruso Vladimir Putin.
Mientras los médicos trataban de reanimar a la niña, su padre era trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos en el mismo hospital tras sufrir heridas por el bombardeo junto a su hija.
Además de la menor fallecida en Mariupol, en Járkov se baraja la muerte de “varios niños” por los bombardeos nocturnos a civiles, mientras que en Chernigov se desconoce si puede haber algún menor entre los fallecidos por el ataque a un edificio residencial del centro de la ciudad.
