A los 80 años, murió Charlie Watts, el histórico baterista de los Rolling Stones. La noticia fue confirmada este martes por su representante pasadas las 13, hora de la Argentina, y puso de luto al mundo de la música.
“Es con inmensa tristeza que anunciamos la muerte de nuestro amado Charlie Watts“, afirma el comunicado difundido en las cuentas oficiales de la banda británica, que agrega que el artista “falleció pacíficamente” en un hospital de Londres, rodeado de su familia.
Se trata del segundo stone original en dejar este mundo. El primero fue Brian Jones, que murió a los 27 años el 3 de julio de 1969. Bill Wyman, el bajista que se alejó de la banda en 1993, tiene 84 años; Mick Jagger, el célebre frontman, 78, mientras que Keith Richards, el guitar hero, suma 77 años. Ron Wood es el más joven de los Stones: cuenta con 74 años.
“Era un querido esposo, padre y abuelo y uno de los más grandes bateristas de su generación”, resume el texto, y cierra: “Solicitamos amablemente que se respete la privacidad de su familia, miembros de la banda y amigos cercanos en este momento difícil”.
La noticia se conoce semanas después de que el entorno de Watts anunciara que el baterista no podría participar de los shows que la banda tenía previstos en los Estados Unidos, entre septiembre y noviembre de este año. “Charlie se ha sometido a un procedimiento que ha sido totalmente exitoso, pero deducimos que sus médicos concluyeron esta semana que necesita un descanso para recuperarse. Al empezar los ensayos en un par de semanas, es muy decepcionante anunciarlo, pero también es justo advertirlo, que nadie vio que esto podía pasar“, rezaba el comunicado publicado en las cuentas oficiales de la banda británica, a comienzos de agosto.
Tras tener que posponer los conciertos de 2020 por la pandemia del coronavirus, los Stones tenían previsto regresar a los escenarios el próximo 26 de septiembre con un concierto en St Louis, Misuri. “Después de todo el sufrimiento de los fans causado por el Covid-19, realmente no quiero que los muchos seguidores de los Rolling Stones que tenían entradas para esta gira queden decepcionados por otro retraso o cancelación. Es por ello que he pedido a mi gran amigo Steve Jordan [el baterista de Keith Richards solista] que se presente por mí”, expresó el baterista en el mismo comunicado, dando a conocer su propio reemplazo para el tramo de la gira norteamericana de la banda.
“Estaremos ansiosos por darle nuevamente la bienvenida a Charlie a los escenarios ni bien esté completamente recuperado. Gracias a nuestro amigo Steve Jordan por hacerse cargo, para que aún podamos actuar en todas las presentaciones previstas para el otoño [boreal]”, expresó Mick Jagger en su cuenta de Twitter, tranquilizando a sus seguidores y dejando en claro que el problema de salud de Watts era algo pasajero.
Watts, oriundo de Londres, fue miembro de los Stones desde enero de 1963, cuando se unió a Mick Jagger, Keith Richards y Brian Jones en su incipiente grupo. Pese a ser reconocido como el miembro más introvertido y tranquilo de la banda -una percepción basada en su gesto adusto y su vida alejada de los escándalos-, el baterista reconoció que transitó años de zozobra por su adicción al alcohol y la heroína. “Me drogaba cuando me iba a casa. Mi mujer se daba cuenta de que no estaba bien”, contó en 2011.
Aun así, Watts siempre se tomó su trabajo con mucha responsabilidad. “El baterista es el motor. No hay nada peor que cuando ya no tenés más aire y te morís del dolor de manos, pero todavía te queda un cuarto de recital. Es lo peor”, explicaba sobre la “suerte” de tener que permanecer en el escenario durante las dos horas que podía durar un show.
Su amor por el jazz lo llevó también a fundar una banda paralela a los Stones, Charlie Watts Quintet, con la que publicó varios discos y emprendió pequeñas giras. También, su aplomo y su sentido estético lo convirtieron en un pilar fundamental de la banda al momento de encarar negocios o elegir el arte de tapa de un disco, tal como contó alguna vez Jagger.
Watts se casó el 14 de octubre de 1964 con Shirley Ann Shepherd, su novia de la adolescencia, con quien tuvo a su única hija, Serafina (nacida en marzo de 1968). Su matrimonio resistió no solo a la explosión de popularidad de la banda, sino también a los años adicciones que atravesó el músico.
En junio de 2004, se le diagnosticó un cáncer de garganta, fue sometido a una intervención para extirpar el tumor y comenzó un tratamiento de radioterapia que se extendió por seis semanas y arrojó buenos resultados.
Pocos meses después, se reintegró a las grabaciones del disco A Bigger Band y en mayo de 2005 reapareció en público junto a sus compañeros, para brindar una pequeña presentación en la Juilliard School de Nueva York, anunciar el lanzamiento de su nuevo trabajo de estudio en más de ocho años y de una nueva gira mundial.
La última presentación en vivo del baterista junto The Rolling Stones se produjo el 30 de agosto de 2019, en Miami, en el marco del No Filter Tour. La gira había iniciado el 9 de septiembre de 2017 en Hamburgo, Alemania, y tenía previsto completar su tramo por los Estados Unidos en 2020; esos planes, sin embargo, se vieron modificados por el avance de la pandemia de coronavirus.
Sin embargo, en abril del año pasado la banda se dejó ver -cada uno desde su casa, interpretando el clásico “You Can’t Always Get What You Want”- para el especial televisivo One World: Together At Home, destinado a recaudar fondos para luchar contra los efectos del Covid-19.
Watts siempre coqueteaba con la posibilidad de retirarse de los escenarios para disfrutar plenamente de su vida campestre en Dolton, al oeste de Devon, en Inglaterra. Sin embargo, algo siempre lo hacía cambiar de idea. “Al final de cada gira digo, ‘bueno, ya está’. Pero luego tenés dos semanas libres y tu esposa te dice: ‘¿No vas a trabajar?’”, decía con mucho humor en 2013, durante una entrevista con The Guardian.